México notificó en 2016 a la OMC que tenía dos empresas comerciales del Estado según la definición del artículo XVII del GATT de 1994.
Estas empresas operan en el sector energético; se trata de Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE), las cuales son consideradas empresas productivas del Estado (EPE).
Por un lado, Pemex reportó ingresos de 2 billones 383,388 millones de pesos en 2022, un alza de 59.4% interanual, y utilidades netas de 99,998 millones de pesos (frente a una pérdida de 294,776 millones en 2021).
Por otra parte, la CFE registró 620,848 millones de pesos, un avance de 9.6%, una pérdida neta de 15,667 millones de pesos (en comparación con una pérdida neta de 106,260 millones en 201).
El objetivo de Pemex y de la CFE es generar valor económico y rentabilidad para el Estado.
En el caso de Pemex, se procura también maximizar la renta petrolera para contribuir al desarrollo económico del país.
Empresas comerciales
Pemex participa en todas las actividades de la cadena productiva del sector de los hidrocarburos.
En 2016, México notificó a la OMC que Pemex tenía el monopolio del comercio del petróleo crudo y de los productos derivados, el gas natural y otros productos.
No obstante, en la misma notificación se indica que el monopolio estatal en cuanto al comercio se eliminó para el GLP y para la gasolina y el diésel.
En 2022, Pemex y una cuarentena de operadores privados, con el permiso de la Secretaría de Energía (Sener), importaron y exportaron hidrocarburos y petrolíferos.
Sin embargo, Pemex es aún el operador más importante.
Hasta 2017 el precio de algunos de los productos petrolíferos estuvo controlado.
Por su parte, la CFE conserva la operación exclusiva de la red de transmisión (y de distribución) eléctrica y, como tal, de las importaciones y exportaciones de electricidad.
Las tarifas de la transmisión (y de la distribución) de electricidad están reguladas.
El Estado tiene el control total (100%) de Pemex, la CFE y sus subsidiarias.
Pemex tiene 3 subsidiarias y la CFE, 10.
En 2019 se creó CFE Telecomunicaciones e Internet para todos, una nueva subsidiaria.
Además de estas dos empresas, en 2021 el Estado controlaba 64 empresas que operaban en varios sectores, principalmente en el sector de los servicios.