La producción de vehículos ligeros en México se incrementó 14.2% a tasa interanual en 2023, alcanzando 3 millones 779,234 unidades, informó este martes el Inegi.
Por volumen de producción, General Motors lideró la clasificación con 722,631 unidades, seguida de Nissan (615,751 unidades), Stellantis (467,542 unidades) y Ford Motor (365,365 unidades).
La industria automotriz de México es una de las más modernas de México, está conformada por varias de las mayores compañías automotrices internacionales y ha crecido en las últimas décadas impulsada sobre todo con la exportación a Estados Unidos, aunque también se ha diversificado geográficamente en sus envíos foráneos.
Otras de las principales empresas productoras en México durante 2023 fueron: Volkswagen (349,227 unidades), Kia (256,000 unidades), Toyota (250,015 unidades) y Mazda (202,506 unidades).
Producción de vehículos
También la industria automotriz mexicana está altamente integrada a las cadenas de valor globales, aunque su encadenamiento productivo se basa en gran medida con Estados Unidos y Canadá.
En cuanto a los desempeños más dinámicos en 2023 en la producción de vehículos ligeros, BMW tuvo la tasa de crecimiento interanual más alta (85.1%), por delante de Nissan (57.5%), Mazda (36.7%), Honda (32.4%) y JAC (31.9 por ciento).
Mundo
Desde 2020, la industria automotriz ha experimentado una disminución en los volúmenes de producción global.
Aunque la producción industrial se ha recuperado modestamente y se espera que en 2023 vuelva a los niveles previos a la pandemia de 2019, la producción industrial se mantiene por debajo de los niveles máximos de 2017.
Además, la economía mundial, así como la industria automotriz, se han visto influenciadas directa e indirectamente por acontecimientos macroeconómicos que han dado lugar a condiciones desfavorables, incluida la escasez de chips semiconductores y otros componentes, niveles elevados de inflación, tasas de interés más altas y escasez de mano de obra y energía en ciertos mercados.
A partir del tercer trimestre de 2023 y hasta el cuarto trimestre, la industria automotriz también se vio afectada por huelgas laborales e interrupciones relacionadas en algunas de las instalaciones en Estados Unidos.
De acuerdo con Lear Corporation, estos factores, entre otros, siguen afectando la demanda de los consumidores, así como la capacidad de los fabricantes de automóviles para producir vehículos que satisfagan la demanda.