Canadá informó a Estados Unidos que está dispuesto a aceptar sus demandas automotrices en la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), dado que con ello obtendría beneficios, destacó el diario canadiense Globe and Mail, basándose en fuentes que pidieron el anonimato.

En las reglas de origen del sector automotriz, Estados Unidos está impulsando medidas restrictivas al comercio, al pedir que 40% del contenido de un automóvil o 45% de una camioneta pick up se fabrique utilizando mano de obra pagada de 16 dólares o más por hora para tener derecho a ser exportados sin cobro de aranceles en el marco del TLCAN, un umbral en el que México está bastante lejos de cumplir, con pagos por alrededor de entre 3 y 5 dólares la hora.

México ha aceptado estas demandas según han revelado varios medios tanto de México como de Estados Unidos y Canadá.

En la cuarta ronda, Estados Unidos presentó una propuesta que eleva de 62.5 a 85% el valor de contenido regional para automóviles, y de esta última tasa, 50% debía ser estadounidense, aunque esta acotación de contenido nacional fue eliminada posteriormente con el componente laboral.

Las reglas de origen automotrices se han convertido en un importante punto de fricción en las negociaciones. Desempeñan un papel importante en la determinación de la cadena de suministro de un producto y, a lo largo de los años, el TLCAN ha creado una cadena de suministro integrada de vehículos en América del Norte.

Las compañías automotrices estadounidenses temen que estos requisitos adicionales de contenido amenacen con interrumpir sus cadenas de suministro.

Según los informes, Estados Unidos ha reducido su propuesta original para exigir 75% de contenido regional sobre automóviles y una regla de origen de tres niveles: de 75% para componentes críticos tales como motores y transmisiones, y de 70% y 65% ​​para otros componentes.

Además, la propuesta de los Estados Unidos requeriría que el 70% de un vehículo fuera fabricado con acero y aluminio de América del Norte.