El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, opinó que los mercados se hundirían si se lleva un juicio político en su contra.
«Le diré algo, si alguna vez me acusaran políticamente, creo que el mercado colapsaría», dijo Trump en una entrevista emitida por «Fox & Friends».
Al mandatario se le preguntó si cree que los demócratas iniciarán un procedimiento de destitución si ganan la Cámara este otoño.
«Creo que todos serían muy pobres. Porque sin este pensamiento se verían cifras que no creerían, en reversa», añadió.
El proceso de juicio político proporciona un mecanismo para la destitución del Presidente, el Vicepresidente y otros «funcionarios civiles de los Estados Unidos» que se han visto implicados en «traición, soborno u otros delitos graves y delitos menores».
La Constitución impone la responsabilidad y la autoridad para determinar si destituir a un individuo en manos de la Cámara de Representantes.
Si una mayoría simple de la Cámara de Representantes aprueba artículos de juicio político que especifiquen los fundamentos en los que se basa el juicio político, entonces el asunto se presenta al Senado, al cual la Constitución proporciona el único poder para intentar una acusación.
Una condena en cualquiera de los artículos de acusación requiere el apoyo de una mayoría de dos tercios de los Senadores presentes. En caso de que se presente una condena, el Senado retiene la autoridad limitada para determinar el castigo apropiado.
Conforme a la Constitución, la pena por una condena por una ofensa imputable se limita a la destitución o remoción y la prohibición de tener futuras oficinas de «honor, fideicomiso o ganancia bajo los Estados Unidos».
«No sé cómo puedes acusar a alguien que ha hecho un gran trabajo», comentó Trump.
Este martes, el exabogado personal de Trump, Michael Cohen, se declaró culpable de delitos graves que implican al mandatario en una financiación ilícita de la campaña presidencial que lo llevó al poder.
Cohen admitió que poco antes de las elecciones de 2016 pagó a una actriz de cine porno, cuyo nombre artístico es Stormy Daniels, y a la exmodelo de Playboy Karen McDougal por callar sobre relaciones con el magnate y que lo hizo “bajo la dirección del candidato”.
Esta transacción, reconoce, “tenía como principal objetivo influir” en los comicios presidenciales.
A la vez, el ex presidente de la campaña de Trump, Paul Manafort, se declaró culpable de ocho cargos de fraude fiscal y bancario.