La capacidad adicional de acero de Estados Unidos prevista podría aumentar las sobrecapacidad global de este metal, afirmó Steel Dynamics.

Esto, a su vez, también puede tener un impacto adverso en la demanda doméstica de chatarra ferrosa y sus márgenes de metales ferrosos en ese país.

Los productores de Estados Unidos compiten con muchos productores extranjeros, incluidos los de China, Vietnam y otros países asiáticos y europeos.

Steel Dynamics expuso que la competencia de los productores extranjeros suele ser fuerte y se ve agravada periódicamente por el debilitamiento de las economías de determinados países productores del extranjero.

Además, arguyó, los bajos precios del mineral de hierro, que provocan la interrupción de la correlación del precio de la chatarra con el mineral de hierro, reducen los costos globales para producir acero, lo que deprime aún más los precios de importación del mismo.

Un mayor volumen de exportaciones a Estados Unidos tiende a producirse a precios deprimidos cuando los países productores de acero experimentan períodos de dificultades económicas, disminución de la demanda de productos de ese metal o exceso de capacidad.

Demasiado acero

En particular, el exceso de capacidad siderúrgica mundial se ve agravado por la capacidad de producción de este metal de China, que supera con creces la demanda de ese país y ha convertido a China en un importante exportador mundial de acero, lo que ha provocado un debilitamiento de los precios mundiales del acero, según Steel Dynamics.

Actualmente, la capacidad mundial de fabricación supera el consumo mundial, lo que afecta negativamente a los precios del acero en Estados Unidos y en el mundo.

Tal exceso de capacidad ocasiona a veces que los fabricantes de ciertos países exporten productos, incluidos los largos, a precios inferiores a los internos vigentes y, algunas veces, a su costo de producción o por debajo de él.

También Steel Dynamics considera que la presión a la baja y los niveles periódicamente deprimidos de los precios de este metal en Estados Unidos en los últimos años se han acentuado aún más debido a las importaciones que implican dumping y abusos de subvenciones por parte de los productores de acero extranjeros.