Las aduanas de México identificaron en 2018 facturas alteradas y/o apócrifas y proveedores no localizados o inexistentes que amparaban compra-venta por mercancía a la importación con un valor en aduana de 1,125.1 millones de pesos, una aumento de 26.1% en términos reales.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) expuso que la identificación de estos ilícitos forman parte del Plan Estratégico Aduanero Bilateral México-Estados Unidos.
En general, los procedimientos aduaneros en México se rigen por la Ley Aduanera y su Reglamento, por las Reglas Generales de Comercio Exterior, que publica todos los años la SHCP, y por un Acuerdo de la Secretaría de Economía (SE).
Desde el ángulo operativo, las aduanas en México son las oficinas públicas administrativas establecidas en las fronteras, litorales y ciudades importantes del país, encargadas de la cobranza de los derechos que percibe el Fisco por la exportación o importación de mercancías.
En especial, la Administración General de Aduanas (AGA) es una entidad del Gobierno Federal dependiente del Servicio de Administración Tributaria (SAT), que a su vez es el órgano desconcentrado de la SCHP, cuya principal función es la de fiscalizar, vigilar y controlar la entrada y salida de mercancías, asegurando el cumplimiento de las disposiciones que en materia de comercio exterior haya expedido la SHCP, así como otras secretarías del Ejecutivo Federal con competencia para ello.
Órgano de control
Adicionalmente la AGA tiene como función el ayudar a garantizar la seguridad nacional, proteger la economía del país, la salud pública y el medio ambiente, impidiendo el flujo de mercancías peligrosas o ilegales hacia México.
Dependiendo del país de origen y medio de transporte, las aduanas con más movimientos comerciales en México son las aduanas de Veracruz (Marítima en el Golfo de México), Manzanillo (Marítima en el Océano Pacifico), Laredo (Terrestre en la Frontera Norte) y del Aeropuerto de la Ciudad de México (Aduana Interior vía Aérea).