Durante el cuarto trimestre de 2018, el promedio de pozos en operación de Pemex fue de 7,466; es decir, 379 pozos menos que el promedio del último trimestre de 2017, como consecuencia de menor actividad en perforación por restricciones presupuestales, así como por la declinación natural de algunos campos.
En contraste, y en línea con la estrategia de Pemex de estabilizar la producción de crudo, en el último trimestre de 2018, el número total de pozos terminados aumentó en 20, esto significa un crecimiento del 95% con relación al mismo periodo de 2017.
Concretamente, el aumento se concentra en la apertura de 35 pozos para el desarrollo de campos.
En lo que respecta a pozos de exploración, durante el cuarto trimestre se terminaron seis de ellos.
Resultados generales
Durante el cuarto trimestre de 2018, la producción total de hidrocarburos de Pemex sumó 2 millones 435,000 barriles de petróleo crudo equivalente diarios (Mbpced); los hidrocarburos líquidos promediaron 1 millón 755,000 barriles diarios (Mbd) y el crudo promedió 1 millón 738,000 Mbd, esta última cifra representa una disminución de 143 Mbd con respecto al mismo trimestre del 2017.
Esta reducción fue ocasionada principalmente por el avance del contacto aguaaceite en Xanab, así como por la declinación natural de algunos campos maduros.
Mientras la producción de crudo pesado aumentó en 2.3% debido a que el campo Ku-Maloob-Zaab permaneció estable y por el desarrollo del campo Ayatsil, la producción de gas natural (sin incluir nitrógeno) registró 3,809 millones de pies cúbicos diarios (MMpcd); esto es una reducción de 5.5% o 222 MMpcd respecto al 4T17.
Finalmente, el proceso de crudo registró 505 Mbd, esto implica una disminución de 12% con respecto al último trimestre de 2017. Este nivel de proceso de crudo es consecuencia de problemas de desempeño en la operación de plantas en la refinería de Madero, la acumulación de inventarios en Tula y Salamanca y por el incendio de una planta en Minatitlán.