Las exportaciones mexicanas de pepino y pepinillo presentaron crecimientos interanuales en los últimos cuatro años, reflejando una oportunidad de negocio para las empresas establecidas en México.

Con ello, la tendencia mostró una línea ascendente desde las exportaciones por 410 millones de dólares en 2014 hasta las alcanzadas por 527 millones de dólares en 2018, según datos de la Secretaría de Economía.

Del total de estas ventas externas, 98.8% se dirigieron a Estados Unidos y el 1.2% restante a Canadá. A nivel global, México es el tercer exportador, destrás de España y Holanda.

De acuerdo con la empresa Seminis, esta hortaliza es muy valorada por su período vegetativo corto, por ser rica en componentes que ayudan a reducir la presión arterial como el potasio, hierro, calcio, fósforo y magnesio, y por tratarse de un cultivo con gran adaptabilidad de siembra, pues puede prosperar incluso en el clima invernal.

Aunque se pueda sembrar en cualquier temporada, el pepino es más abundante durante la estación de primavera, pues en los meses de febrero, marzo y abril es cuando se levanta el 44% de la cosecha total del año.

Internamente, Sinaloa es el estado de México que más produce y exporta pepino, y es su segundo cultivo de más importancia después del tomate.

Algunas regiones donde se produce este cultivo en mayores cantidades son los valles de Culiacán, Mocorito, Guasave, Los Mochis y Cruz de Elota. De las 817,000 toneladas de pepino que se produjeron en México durante 2017, Sinaloa aportó 360,000.

De acuerdo con Seminis, se acostumbra a sembrar tanto en campo abierto como en cultivo protegido, pero en invernadero se pueden llegar a cosechar hasta 179 toneladas por hectárea.

Producción global

Debido a este nivel de producción, México se ha colocado como el octavo lugar mundial en producción de pepino, siendo sus principales competidores también España y Holanda.

Aunque Sinaloa tiene el gran poder de exportación de pepino en el país, también se da en otros estados como Michoacán, Morelos, Veracruz, Baja California, Guanajuato y Jalisco, pero estas regiones no necesariamente se concentran en la exportación, sino que se dedican a satisfacer la demanda interna nacional.

La tecnología ha influido verdaderamente a que nuestro país progrese al sembrar este fruto, pues ahora se hace uso de herramientas para mejorar la calidad y rendimiento, como métodos modernos de fertirrigación, semillas mejoradas y acolchado para control de la humedad en los campos.