La producción mundial de leche (81% de leche de vaca, 15% de leche de búfalo y 4% de leche combinada de cabra, oveja y camello) creció 1.3% en 2019, a alrededor de 852 millones de toneladas, de acuerdo con la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
Globalmente, el consumo per cápita de leche y productos lácteos es mayor en los países desarrollados, pero la diferencia con muchos países en desarrollo se está reduciendo.
La demanda de leche y productos lácteos en los países en desarrollo está creciendo como consecuencia del aumento de los ingresos, el crecimiento demográfico, la urbanización y los cambios en los regímenes alimentarios.
Según la FAO, en India, el mayor productor de leche del mundo, la producción avanzó 4,2%, a 192 millones de toneladas, aunque esto tuvo poco impacto en el mercado mundial de productos lácteos, ya que la India solo comercializa cantidades marginales de leche y productos lácteos.
Producción mundial de leche
La producción de leche de los tres principales exportadores de lácteos, Nueva Zelanda, la Unión Europea y Estados Unidos, escaló solo ligeramente.
Como el consumo interno de productos lácteos en estos tres países es estable, la disponibilidad de productos lácteos fresco1 y productos procesados para la exportación aumentó.
En China, el mayor importador mundial de productos lácteos, la producción de leche aumentó 3.6% en 2019. Sus importaciones de productos lácteos, especialmente de leche entera en polvo (WMP, por su sigla en inglés) y de leche descremada en polvo (SMP, por su sigla en inglés). Sin embargo, aumentó en 2019 debido a la creciente demanda.
Los precios internacionales de los lácteos se refieren a productos lácteos distintos de la leche sin procesar, que prácticamente no se comercializa. La mantequilla es la referencia para la grasa láctea y SMP para otros sólidos lácteos.
La grasa de la leche y otros sólidos lácteos juntos representan aproximadamente 13% del peso de la leche, y el resto es agua. Aunque el precio mundial de la mantequilla continuó disminuyendo en comparación con sus niveles récord de precios de 2017, se mantuvo alto en términos reales.