La demanda china de acero sorprendió al alza en 2020 en general, creciendo alrededor de 9% interanual, destacó ArcelorMittal.

Para la empresa, esta tendencia respaldada por una política que exige un aumento en la intensidad del acero de la construcción.

Si bien es probable que la demanda crezca aún más en 2021, eventualmente se espera que disminuya, ya que el gasto en infraestructura se ha adelantado y la demanda de bienes raíces se debilita estructuralmente debido a niveles más bajos de migración rural-urbana.

Además, también de conformidad con ArcelorMittal, si esto no coincide con cierres de capacidad renovados, se espera que tenga un impacto negativo en los precios y los diferenciales del acero.

Históricamente, la dinámica de la demanda en China ha afectado sustancialmente al negocio mundial del acero, sobre todo debido a cambios significativos en las exportaciones netas de acero.

ArcelorMittal

A pesar de que la pandemia afectó significativamente a China en febrero y marzo de 2020, el mayor uso por parte del gobierno de bonos locales y soberanos especiales para financiar una mayor inversión, principalmente proyectos de infraestructura, apoyó una sólida recuperación en el consumo de acero.

La producción manufacturera también se recuperó con fuerza y ​​volvió a la tendencia de crecimiento a principios de la segunda mitad de 2020.

El exceso de capacidad y el exceso de oferta en la industria del acero y en la industria minera de mineral de hierro han influido en el pasado y pueden continuar en el futuro sobre la rentabilidad de los productores de acero, incluido ArcelorMittal.

A diferencia de muchos productos básicos, el acero no es completamente fungible debido a las grandes diferencias en su forma, composición química, calidad, especificaciones y aplicación, todo lo cual afecta los precios de venta.

En consecuencia, todavía existe un intercambio limitado y un precio uniforme del acero, mientras que hay un aumento en el comercio de las materias primas del acero, en particular el mineral de hierro.

Los precios al contado de los productos básicos pueden variar, lo que hace que los precios de venta de las exportaciones fluctúen en función del equilibrio mundial de oferta y demanda en el momento en que se realizan las ventas.