El sector cafetero se ha expandido significativamente en las últimas dos décadas a medida que la demanda mundial de café aumentó en 65%, destacó un informe del Centro de Comercio Internacional (ITC, por su sigla en inglés).

En general, el principal impulsor del crecimiento ha sido el aumento del consumo en las economías emergentes y los países productores de café.

¿En dónde están las oportunidades de negocio? El crecimiento de segmentos de mercado de alto valor como el café de especialidad, junto con las innovaciones de productos que brindan nuevos sabores y más conveniencia a los consumidores, han revitalizado la demanda en los mercados tradicionales con un consumo per cápita ya alto.

Además, según el informe, el café es de gran importancia económica para muchos países productores.

Para algunos, esto se refleja en su participación en los ingresos nacionales de exportación, que puede ser significativa.

El café representa más de una cuarta parte de los ingresos de exportación en Etiopía y al menos 20% de los ingresos nacionales de exportación en Burundi.

Luego siguen Timor Leste, Uganda y Honduras con una participación de 10 por ciento.

Demanda mundial de café

El café es uno de los productos básicos tropicales más importantes.

Proporciona beneficios económicos en cada paso de la cadena de valor global que vincula a los productores con los consumidores.

La industria del café contribuye a las economías de los países exportadores e importadores.

Como bebida, es la favorito de un número creciente de consumidores en todo el mundo y es uno de los productos agrícolas más comercializados en el mundo.

Solo en 2017, se exportó 70% de la producción total de café, por un valor de 19,000 millones de dólares, indica la ITC.

Ese mismo año, el sector tenía un valor de mercado minorista de 83,000 millones de dólares, proporcionando empleo a 125 millones de personas.

Pero eso no esto. Hay 12.5 millones de fincas cafetaleras en todo el mundo, según Enveritas, y alrededor de 95% de ellas son menores de cinco hectáreas y se consideran “pequeños agricultores”.

Estos se encuentran predominantemente en 20 países donde el clima y el suelo son adecuados para el cultivo de café.

Casi la mitad de estas granjas se encuentran en Etiopía (2.2 millones), Uganda (1.8 millones) e Indonesia (1.3 millones).

Vietnam, Burundi, Kenia y Colombia tienen cada uno más de 500,000 agricultores.

Los pequeños productores son la columna vertebral de esta gigantesca industria global y al menos 5.5 millones viven por debajo del umbral internacional de pobreza de 3.20 dólares al día. Los niveles más altos de pobreza se observan en África y Oceanía.