Las exportaciones de mercancías de Estados Unidos registraron una participación de 46.2% en el total de importaciones de México de enero a octubre del 2016, su menor nivel en la era del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), de acuerdo con datos de la Secretaría de Economía (SE).
En los primeros 10 meses del año en curso las compras externas mexicanas de productos sumaron un valor de 319,595 millones de dólares, de las cuales las originarias de Estados Unidos fueron por 147,748 millones de dólares.
En 1993, el año previo al TLCAN, la cuota de Estados Unidos en las importaciones mexicanas se ubicó en 69.3%, lo cual implica que desde entonces ha perdido 23.1 puntos porcentuales.
Con el triunfo de Donald Trump en las elecciones presidenciales estadounidenses, el peso extendió sus pérdidas frente al dólar. Este lunes por la mañana, cotizó en alrededor de 20.61 pesos, una depreciación de 19.8% frente al cierre del 2015.
Un dólar fuerte hace que sea más difícil impulsar las exportaciones estadounidenses al mundo. Un reporte de Citibanamex señaló que en relación con las compras externas mexicanas, “los datos que vienen confirmarán si la debilidad del peso también está llevando a algún grado de sustitución de importaciones”.
En los mercados cambiarios el dólar se apreció este año frente a la mayoría de las divisas de países desarrollados debido a la expectativa de un mayor crecimiento en Estados Unidos y la importante alza de las tasas de interés en ese país.
Según datos del Departamento de Comercio, las exportaciones de Estados Unidos al mundo totalizaron 1.2 billones de dólares de enero a octubre, una caída anual de 4.7 por ciento. Las exportaciones estadounidenses han presentado bajas a tasas anuales en productos como alimentos, bebidas, soya, maíz, oro, petróleo y bienes de consumo.
En última minuta del Banco de México sobre política monetaria, algunos miembros de la Junta de Gobierno destacaron la apreciación del dólar respecto a prácticamente todas las divisas, especialmente a las de países emergentes.
Uno de ellos advirtió que desde hace tiempo también existen otros factores de riesgo para los mercados globales, entre los que destacan el proceso de normalización de la política monetaria por parte de la Reserva Federal, las negociaciones de salida del Reino Unido de la Unión Europea, la efectividad de la política monetaria en algunas economías avanzadas y consideraciones de orden geopolítico.
Otro añadió que problemas de mercados no profundos que predominan en economías emergentes y episodios de falta de liquidez también podrían exacerbar la volatilidad.