La obesidad entre los adultos de 18 años o más aumentó rápidamente en todas las regiones del mundo entre 2000 y 2016, de acuerdo con las más recientes estadísticas de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
Los datos muestran que 13.1% de la población adulta en el mundo era obesa en 2016, un aumento desde la porción de 8.7% en 2000.
En particular, Oceanía, América del Norte y Europa tenían la prevalencia más alta de obesidad en adultos (ambas en torno a 27-28 por ciento), seguidas de América Latina y el Caribe.
Obesidad
Aunque ha ido aumentando constantemente, la prevalencia de la obesidad en adultos en África y Asia fue más baja que el promedio mundial.
Los 20 países con la mayor prevalencia de obesidad entre adultos en 2016 se agruparon en las Islas del Pacífico, el Cercano Oriente y África del Norte.
En todos ellos, 30% o más de la población es obesa, con la proporción más alta en Nauru con 61 por ciento.
En muchos de estos países, coexisten múltiples formas de malnutrición: en Egipto, por ejemplo, la prevalencia del retraso del crecimiento infantil llegó a 22.3% en 2014, mientras que la prevalencia de la obesidad en adultos fue del 32% en 2016.
Crecimiento infantil
La prevalencia del retraso del crecimiento entre los niños menores de cinco años (así como el número de niños con retraso del crecimiento) disminuyó en todo el mundo de 33% en 2000 a 22% en 2020, de acuerdo con la FAO.
La disminución tuvo lugar en todas las regiones en desarrollo, con la mayor caída en Asia, de 37% en 2000 a 22% en 2020.
Sin embargo, este progreso global puede haber disfrazado una situación más dura en algunas partes del mundo.
La prevalencia del retraso del crecimiento infantil sigue siendo extremadamente alta en algunos países, llegando a veces a más de 50 por ciento.
La mayoría de los países con una alta prevalencia de retraso del crecimiento se encuentran en África subsahariana.