Argentina y México extendieron por otros tres años los cupos automotrices que se otorgan mutuamente, posponiendo nuevamente una apertura total en el sector automotriz.

Así, ambos países acordaron otorgarse de forma recíproca, por un período de tres años, un arancel cero a las cuotas de importación anuales de conformidad con los términos señalados en la siguiente tabla:

Los vehículos en cuestión son automóviles y camiones de peso total con carga máxima inferior o igual a 8 845 kg  (vehículos, chasis con motor y cabina y carrocerías para estos vehículos).

Las cuotas serán asignadas a las empresas exportadoras y administradas por la Parte exportadora y verificadas por la Parte importadora.

Asimismo, las Partes, de conformidad con lo establecido en un protocolo, no impondrán otras restricciones que limiten el uso de dichas cuotas.

Sin perjuicio de la asignación del cupo que reciban las empresas exportadoras para un período determinado, una Parte podrá asignar un cupo adicional con la preferencia plena equivalente a los valores exportados por la otra Parte.

Por otra parte, las Partes aplicarán la siguiente fórmula para la determinación del Índice de Contenido Regional (ICR):

Sobre esto último, el valor del ICR será de 35% del 19 de marzo de 2022 y hasta el 18 de marzo de 2025. Las Partes acordarán el ICR y la fórmula que regirán a partir del 19 de marzo de 2025 para calcular el ICR.

Cupos automotrices

En 2021, las exportaciones mexicanas de automóviles a Argentina totalizaron 126 millones de dólares, mientras que las ventas argentinas de autos a México fueron nulas.

De acuerdo con la aseguradora de crédito francesa Coface, el crecimiento del PIB de Argentina debería desacelerarse bruscamente este año, a medida que se desvanezcan las ganancias relacionadas con la reapertura de la actividad.

Para la Coface, es probable que el consumo de los hogares en Argentina (67% del PIB) registre un tímido aumento, a medida que el mercado laboral se recupere gradualmente.

No obstante, amplió la aseguradora, la alta inflación debería aumentar aún más debido a los ajustes en los precios reprimidos, el financiamiento monetario en curso del déficit fiscal y a medida que el banco central aumenta el ritmo de depreciación de la moneda.

Mientras tanto, las exportaciones (21% del PBI) se verán respaldadas por el alza de los precios de los commodities agrícolas y minerales.