El Valor de Contenido Laboral del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) funciona a favor de Estados Unidos, concluyó el Congreso de este último país en un informe.
La administración del presidente Joe Biden fue la primera en utilizar el Mecanismo de Respuesta Rápida del T-MEC para elevar los salarios en Estados Unidos.
Al respecto, el Comité económico conjunto del Congreso de Estados Unidos concluyó que la aplicación estricta de las disposiciones laborales del T-MEC garantizará que las empresas “ya no puedan explotar a los trabajadores en México” para ahorrar en costes laborales.
Valor de Contenido Laboral
Como resultado de este cambio en la aplicación, agrega el documento, las empresas tendrán menos incentivos para recortar los puestos de trabajo y los salarios en la fabricación estadounidense y enviar los empleos fuera del país.
El T-MEC establece un Valor de Contenido Laboral de 40% para automóviles. Esto es, 40% del valor del vehículo deberá producirse utilizando salarios, al menos de 16 dólares estadounidenses por hora.
“Este requisito incentiva las inversiones en nuevos vehículos y piezas en Estados Unidos, apoya los puestos de trabajo bien remunerados y ayuda a garantizar que los trabajadores y productores estadounidenses puedan competir en igualdad de condiciones”, destacó la Representación Comercial de la Casa Blanca (USTR) en otro informe.
Paralelamente, el gobierno estadounidense ha tomado medidas para aumentar los salarios y proteger a los trabajadores.
Bajo el mandato del presidente Biden, el Departamento de Trabajo de Estados Unidos está ayudando a garantizar que más de 11 millones de trabajadores estadounidenses obtengan el salario que merecen, mejorando las directrices sobre cuándo los empleadores pueden aplicar las propinas para cumplir con las leyes de salario mínimo.
Esta acción revierte las políticas de la administración Trump que facilitaron el pago insuficiente de ciertos empleados.
También el gobierno de Biden implementó un salario mínimo de 15 dólares para los contratistas federales, desde el piso anterior de 10.95 dólares. Este aumento impactará a más de 300,000 trabajadores y ayudará a muchos más.
Además, el aumento del salario mínimo para los contratistas federales impulsará los salarios de aquellos que no trabajan para los contratistas federales al aumentar la competencia por el talento.
Los empleadores que compiten con los contratistas federales por los trabajadores se enfrentarán a la presión de aumentar también los salarios para satisfacer las necesidades de contratación, estimulando aumentos salariales más amplios.