La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) difundió un informe en el que dimensiona la producción de aluminio, níquel y paladio en Rusia.
Para empezar, esta nación asiática representa 5.5% de la producción mundial de aluminio y una parte similar de las exportaciones mundiales de aluminio, lo que la convierte en el tercer productor mundial después de la República Popular China y la India.
Producción de aluminio
Esta cifra relativamente pequeña oculta la heterogeneidad de la dependencia de algunos países. En particular, Turquía obtiene 35% de sus importaciones de aluminio de Rusia, y Japón, Polonia y China importan más de 10% de su aluminio de Rusia.
También el aluminio ruso es relativamente menos intensivo en CO2 que las alternativas de China, India y los países del Golfo, ya que las fundiciones del país se alimentan en gran medida de energía hidroeléctrica.
Por otro lado, Rusia posee 11% de la producción mundial de níquel y 15% de las exportaciones mundiales de este metal.
El país es uno de los principales proveedores de níquel de Finlandia, con una cuota de importación de 84 por ciento.
Asimismo, Rusia exporta níquel a los Países Bajos, Ucrania y China, con cuotas de importación de 34, 23 y 13% respectivamente.
Por último, los principales exportadores de paladio son Rusia, Sudáfrica, Reino Unido, Estados Unidos, Alemania, Italia y Bélgica.
Rusia representa 43% de la producción mundial de paladio y 21% de las exportaciones mundiales.
Muchos países dependen de Rusia para una parte sustancial de sus importaciones de paladio, entre ellos Japón (43%), Estados Unidos (37%), Reino Unido (30.5%), China (28.5%), Italia (26%), Alemania (21%) y Corea (20 por ciento).
En general, según la OCDE, las perturbaciones causadas por la invasión de Ucrania por parte de Rusia, las consiguientes sanciones económicas a Rusia y sus posibles represalias han afectado gravemente a los mercados mundiales.
Los precios del petróleo, el gas y determinados productos agrícolas han aumentado, intensificando las presiones inflacionistas y amenazando la seguridad alimentaria en algunas economías en desarrollo.