La Organización Mundial de Comercio (OMC) destacó riesgos en la seguridad alimentaria de varios países a consecuencia de la guerra entre Rusia y Ucrania.
A nivel global, los precios de los alimentos en dólares estadounidenses han subido mucho debido a que la Federación Rusa y Ucrania son los principales proveedores de cereales y fertilizantes.
La OMC indica que esto hace que la seguridad alimentaria sea motivo de preocupación en muchos países, sobre todo en los de bajos ingresos, que suelen gastar una gran parte de sus ingresos en alimentos.
También muchas monedas han caído frente al dólar en los últimos meses, lo que hace que los alimentos y los combustibles sean aún más caros en términos de moneda nacional.
Estimated value and volume of world trade in wheat, January 2020-July 2022. (Index, January 2020=100).
Los precios mundiales de los cereales subieron en agosto 15% en forma interanual, y sólo el correspondiente al trigo tuvo un alza de 18 por ciento.
Esto supone una mejora respecto a abril, cuando los cereales habían subido un 33% y el trigo 76 por ciento.
Más preocupantes para el futuro son los precios de los fertilizantes, que subieron 60% interanual en agosto, tras casi triplicarse desde 2020.
En la perspectiva de la OMC, la reducción de las importaciones y el uso de fertilizantes podrían reducir el rendimiento de los cultivos y aumentar la inseguridad alimentaria el próximo año.
Seguridad alimentaria
Aunque la situación del suministro de cereales puede no ser tan grave como algunos temían al comienzo de la guerra de Ucrania, sigue siendo motivo de preocupación.
En julio, el volumen de trigo comercializado descendió casi 20% en comparación con marzo, pero solo 4% en términos interanuales.
Los datos subyacentes sugieren que algunos países han respondido a la subida de precios reduciendo el consumo y las importaciones.
Desde marzo, las cantidades de trigo importado han disminuido en términos interanuales en Bolivia (-69%), Jordania (-41%), Zambia (-38%), Nigeria (-37%) y Ecuador (-30%), entre otros.