Roberto Azevedo, director general de la Organización Mundial de Comercio (OMC), advirtió que aunque aún es un término precipitado, una guerra comercial que fuera desatada por posibles políticas proteccionistas de Donald Trump, sería catastrófica.

En una reunión del Consejo General, celebrada este martes, los miembros de la OMC acordaron por consenso nombrar a Azevedo como director general para un segundo mandato de cuatro años.

Ese mismo día, en una entrevista con la revista alemana BILD, Azevedo fue interrogado sobre cómo respondería en un tweet a la retórica comercial de Trump. «Yo ni siquiera necesito 140 caracteres para esto, mi tweet sería: Sin el comercio, Estados Unidos nunca será grande de nuevo», replicó.

«No debemos hablar demasiado prematuramente de una guerra comercial», agregó. «Sería catastrófico si tuviéramos que experimentar una guerra comercial, las consecuencias serían el desempleo masivo y una seria recesión mundial, para un país exportador como Alemania, en particular, esto sería catastrófico».

Desde antes que Trump ganara la Presidencia de Estados Unidos, varios analistas y medios han advertido que sus políticas propuestas pueden producir una guerra comercial global.

En mayo de 2016, por ejemplo, el diario japonés Nikkei dijo en una editorial que el comercio y la economía global se verían afectadas si Trump ganaba la Presidencia de Estados Unidos y llevaba a cabo sus propuestas relacionadas con el comercio internacional.

Trump ha pedido en repetidas ocasiones aranceles más altos a las mercancías procedentes de China y México, quienes han aumentado considerablemente las exportaciones a Estados Unidos en los últimos años.

Nikkei expuso que si un país pone barreras elevadas a la importación, sus socios comerciales estarían propensos a responder de la misma forma. El resultado de estos intercambios, ojo por ojo, es claro en la historia. En la década de 1930, los países se apresuraron a subir aranceles y formar bloques económicos regionales, profundizando la Gran Depresión.