El Indicador IMEF Manufacturero disminuyó 1.9 puntos en febrero para ubicarse en 46.8 unidades y acumular cuatro meses en zona de contracción.
El indicador varía en un intervalo de 0 a 100 puntos y el nivel de 50 puntos representa el umbral entre una expansión (mayor a 50) y una contracción (menor a 50), de la actividad económica.
A su vez, el Indicador IMEF No Manufacturero registró una disminución de 0.5 puntos al situarse en 46.2 unidades, con lo que acumula cinco meses en zona de contracción.
Las lecturas de febrero del indicador IMEF manufacturero y no manufacturero sugieren que el debilitamiento de la actividad económica que inició durante el segundo semestre de 2016 se agudizó al comienzo de 2017. El debilitamiento de la actividad económica es relativamente mayor en el sector no manufacturero que en el sector manufacturero.
“En la revisión de la coyuntura económica, los miembros del Comité Técnico resaltaron que al inicio del año había predominado un pesimismo generalizado, el cual se reflejó con claridad en el desplome en enero de los índices de la confianza empresarial y del consumidor”, dijo el IMEF.
Sin embargo, también apuntaron que existía información que podría indicar que dicha percepción podría ser una sobrerreacción a eventos específicos, como el alza de los precios de las gasolinas y la depreciación del peso registrada al inicio del año.
Por ejemplo, se comentó que el desempeño del PIB al cierre de 2016 fue mejor al esperado y mostraba que el debilitamiento de la actividad económica había sido menor al estimado por los analistas. Otro factor positivo que debe destacarse fue la estabilización del balance de cuenta corriente durante 2016.
Con todo, los miembros reconocieron que los riesgos para el crecimiento de la economía nacional se habían incrementado para 2017 por diversos factores, siendo el principal la incertidumbre sobre la relación bilateral entre México y Estados Unidos en materia comercial y migratoria.
Al respecto, recalcaron el fuerte vínculo que existe entre las exportaciones mexicanas y la industria manufacturera nacional como mecanismo de transmisión de la implementación de una política proteccionista en los Estados Unidos.
Por ello, se enfatizó la relevancia de vigilar los resultados de la balanza comercial en los próximos meses. En ese sentido, y tomando en cuenta la mejora relativa que habían tenido los mercados financieros en el país, fue que los miembros estimaron que al momento de la reunión se presentaba una situación de “tensa calma”.