El gobierno federal de México ofrece como principales apoyos a los productores de maíz los precios de garantía, Producción para el Bienestar y Fertilizantes para el Bienestar.

Productores de maíz

Precios de Garantía

El establecimiento de precios de garantía al maíz ha contribuido a que los productores rurales de pequeña y mediana escala tengan un mejor ingreso por el trabajo que realizan.

De septiembre de 2020 a junio del 2021, se realizó el acopio del grano correspondiente al ciclo primavera-verano 2020 (mayo-octubre), beneficiando con 4,025 millones de pesos a 51,525 productores, a través de la compra de 700,067 toneladas.

Segalmex ha realizado labores de acopio a través de 538 centros para la recepción de granos de maíz y frijol, distribuidos en 29 entidades federativas (excepto Baja California, Baja California Sur y Ciudad de México).

Con la cantidad producida de este maíz blanco, el país continúa siendo autosuficiente en este producto alimenticio esencial en la dieta de los mexicanos.

Sin embargo, sigue siendo un importante importador de maíz amarillo para fines de procesamiento o alimento pecuario.

Producción para el Bienestar

También el gobierno de México da Apoyos Productivos Directos, sin intermediarios para dotar de liquidez a los productores, para su inversión en actividades productivas de sus predios o unidades de producción.

En 2021 se apoyaron a 1 millón 580,880 productores de pequeña escala de maíz.

Además, se apoya con planes de formación y capacitación virtuales o presenciales en temas como nutrición para el suelo con enfoque agroecológico, manejo y conservación de suelos entre otros.

Fertilizantes para el Bienestar.

Estos apoyos se otorgan a los productores de pequeña escala, priorizando a los de mayor vulnerabilidad en los cultivos prioritarios de maíz.

La mayoría del fertilizante entregado a los productores se aplicó al cultivo del maíz, al que se destinó 97.2% del fertilizante entregado.

Productores de maíz y piensos

El precio del sorgo, la harina de soja y el maíz está sujeto a una volatilidad significativa derivada de muchos factores externos como las condiciones meteorológicas, el tamaño de las cosechas y los costes de transporte y almacenamiento, entre otros.

Para reducir el posible efecto adverso de las fluctuaciones del precio de los cereales, la empresa Industrias Bachoco, por ejemplo, varía la composición de sus piensos para aprovechar los precios de mercado actuales de los distintos tipos de ingredientes utilizados.