Los anticuerpos conllevan 500 millones de años de evolución del sistema inmunitario, refiere la empresa OmniAb, quien destaca lo siguiente sobre el mercado de terapias.
En 2021, las terapias aprobadas basadas en anticuerpos representaron más de 215,000 millones de dólares en ventas, según los datos publicados por La Merie Publishing.
También según La Merie Publishing, en 2021, 49 terapéuticas basadas en anticuerpos alcanzaron el estatus de blockbuster con ventas superiores a los 1,000 millones de dólares, frente a los 41 anticuerpos de 2020.
Además, Fatpos Global estima que se espera que las ventas de terapias basadas en anticuerpos crezcan hasta aproximadamente 365,000 millones de dólares en 2030.
Según la revista Vaccines, los anticuerpos son uno de los tipos de fármacos de más rápido crecimiento y se utilizan en muchas áreas terapéuticas, como la oncología, la inflamación y la neurodegeneración.
Los datos de EvaluatePharma indican que los anticuerpos monoclonales han representado la mayoría de los 10 fármacos más vendidos en los últimos cinco años.
A pesar de los avances en otras modalidades terapéuticas, la inversión en anticuerpos se ha acelerado en la última década, lo que se ha traducido en productividad clínica y, en última instancia, en la aprobación de nuevos fármacos.
Mercado de terapias
Según datos de la Sociedad de Anticuerpos, el número de anticuerpos en la clínica ha aumentado a una Tasa de Crecimiento Anual Compuesta estimada de 11%, pasando de aproximadamente 500 en 2015 a aproximadamente 950 en 2021.
La expansión del desarrollo clínico ha llevado a un ritmo acelerado de aprobaciones regulatorias.
La FDA aprobó el primer anticuerpo terapéutico en 1986. En 2015, la FDA aprobó su anticuerpo número 50, y seis años más tarde, en 2021, aprobó su anticuerpo número 100.
Los anticuerpos son proteínas de la sangre producidas por el sistema inmunitario adaptativo en respuesta a un antígeno extraño específico, y se unen a sustancias que el organismo reconoce como extrañas, como bacterias, virus, células cancerosas y proteínas de la sangre.
También los anticuerpos pueden utilizarse para atacar proteínas de la superficie celular críticas para las funciones biológicas y las enfermedades.
Cuerpo humano
El sistema inmunitario crea anticuerpos a través de un proceso de mezcla aleatoria de fragmentos de ADN conocido como recombinación V(D)J. Durante este proceso, dos genes separados, denominados genes de la recombinación V(D)J, se unen para formar un anticuerpo.
Durante este proceso se ensamblan dos genes separados, denominados cadena pesada y ligera, para crear una proteína de anticuerpo en forma de Y.
La mezcla de estos fragmentos de ADN, así como las inserciones, supresiones y modificaciones aleatorias del ADN, dan lugar a más de 100 billones de anticuerpos diferentes.
En un momento dado, el cuerpo humano suele tener aproximadamente 1,000 millones de anticuerpos diferentes circulando por el torrente sanguíneo.
Cada anticuerpo es creado por un linfocito B inmunitario. Cuando la célula B que expresa el anticuerpo se une a un antígeno, la célula B prolifera rápidamente y se diferencia en una familia de células estrechamente relacionadas que producen anticuerpos ligeramente diferenciados.
Este proceso iterativo selecciona preferentemente anticuerpos que están optimizados de forma natural para ser más eficaces en la neutralización del antígeno específico.
Este proceso, denominado maduración por afinidad in vivo, ha evolucionado a lo largo de 500 millones de años para seleccionar de forma natural anticuerpos optimizados para su función prevista.