La empresa cementera Cemex utiliza residuos de biomasa y materiales no reciclables para alimentar hornos, lo que es una palanca clave en su camino hacia la consecución de sus objetivos de descarbonización.
Esta actividad no solo beneficia a Cemex al ayudar a los municipios a reducir los residuos que van a parar a los vertederos, sino que también permite a la empresa reducir el uso de combustibles fósiles caros en sus procesos de producción.
En 2022, las operaciones de la empresa en Europa procesaron residuos equivalentes a la cantidad anual producida por una ciudad del tamaño de Madrid, logrando una sustitución de combustibles alternativos cercana a 70% en la región, superior a la media del sector.
Al 31 de diciembre de 2022, tres de las plantas de cemento de Cemex ya producían cemento con niveles de CO2 inferiores a 430 kg por tonelada, su nuevo objetivo consolidado para 2030.
Como resultado, las operaciones de la empresa en Europa han logrado una reducción de 40% en las emisiones de CO2 en comparación con su línea base de 1990.
También Cemex está impulsando el uso de combustibles alternativos mediante la inyección de hidrógeno en sus hornos de cemento para optimizar el proceso.
Después de implementar con éxito esta tecnología en sus plantas en Europa, la empresa ha anunciado inversiones para implementar la inyección de hidrógeno en cuatro plantas en México en 2023, y espera continuar escalando su uso en otras operaciones en todo el mundo.
Residuos de biomasa
En 2022, Cemex lanzó Regenera, su nuevo negocio global de gestión de residuos, con el que pretende reforzar aún más sus capacidades y los servicios de circularidad que ofrece a sus clientes.
Su objetivo es aumentar en más de 50% la cantidad de residuos y subproductos que gestiona para 2030, con especial atención a los residuos municipales e industriales; los residuos de construcción, demolición y excavación; y otros residuos y subproductos industriales.
En conjunto, en 2022, Cemex estima que gestiona cerca de 27 millones de toneladas de residuos, 67 veces más que los residuos no reciclables que genera.
La empresa considera que el éxito de sus esfuerzos dependerá de la acogida del mercado a sus productos más bajos en carbono.