En el cuarto trimestre de 2022, la inversión en la industria minera de Perú totalizó 1,650 millones de dólares, cifra inferior en 77 millones a la registrada en el cuarto trimestre del año anterior.

Por empresa, destacan las siguientes inversiones:

• Anglo American Quellaveco, disminuyó su inversión a 205 millones en comparación a los 409 millones del cuarto trimestre de 2021, debido a un menor desembolso en las áreas de planes de beneficios e infraestructura en su Unidad Minera Quellaveco.
• Al mismo tiempo, Antapaccay redujo su inversión en 77 millones de dólares, derivado en parte de los menores desembolsos en el rubro de equipos mineros e infraestructura.
• Por último, Shouxin, que ocupó el tercer lugar, disminuyó su inversión en 15 millones de dólares, como resultado de un ajuste en el monto de su inversión por provisiones y baja de activos obsoletos.

En 2022, el sector de la minería metálica en Perú se contrajo en 0.2% debido a una disminución de 10.7% en los niveles de zinc, explicada por la menor producción de la Compañía Minera Los Quenuales debido al agotamiento de la unidad Iscaycruz y a menores leyes de mineral en las unidades Nexa y Antamina.

La plata disminuyó en 7,6% debido a la menor producción de las unidades Los Quenuales, Ares y Buenaventura.

Industria minera

La unidad Uchucchacua de Buenaventura implementó medidas para mejorar la eficiencia operativa que disminuyeron la producción minera.

La extracción de molibdeno disminuyó 7.5% debido a la menor producción de las unidades Southern y Las Bambas.

Por otro lado, la mayor producción de cobre aumentó 4,1%, impulsada por la entrada en producción de Quellaveco y la mayor extracción de la mayoría de las minas, a excepción de las unidades Antapaccay, Southern y Las Bambas, con operaciones suspendidas en las unidades Southern y Las Bambas por más de 50 días en 2022 debido a conflictos sociales.

Para 2023, el gobierno peruano espera la recuperación de los sectores primarios particularmente en la minería metálica: se proyecta un efecto positivo debido a los proyectos que recientemente han iniciado sus operaciones, como Quellaveco, y de la reactivación de minas que paralizaron sus actividades en 2022 debido a disturbios civiles.

En abril de 2023, se han ratificado algunas inversiones privadas, como la ampliación de Antamina por 2,000 millones de dólares (un incremento respecto a los 1,600 millones anunciados en 2022), el proyecto “La Granja” de Río Tinto y First Quantum Minerals con una inversión de 5,000 millones, entre otros.