La Comisión Reguladora de Energía (CRE) confirmó que programó adelantar el fin del proceso de flexibilización de los mercados de gasolinas y diésel en México.
El próximo 30 de noviembre quedará liberado el precio de las gasolinas en todo el país, luego de que se adelantará la quinta y última fase de este proceso un mes.
Actualmente los estados del norte del país están dentro del llamado «esquema de flexibilización de precios»; es decir, la apertura total, mientras que en el resto del país las estaciones de servicio deben apegarse a la lista de precios que publica todas las tardes la CRE. La apertura de la cuarta etapa se retrasó.
La primera etapa entró en vigor el 30 de marzo en los estados de Baja California y Sonora; la segunda etapa comenzó el 15 de junio en Chihuahua, Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas y en el municipio de Gómez Palacio, Durango; y la tercera etapa que comprendió los estados de Baja California Sur, Sinaloa y el resto de Durango, comenzó el 30 de octubre.
«Con base en la experiencia de las tres etapas de flexibilización anteriores, la CRE ha observado, por un lado, que en las zonas ya liberadas se parecía una tendencia general a la estabilidad en los precios, y por el otro lado, que el proceso ha despertado el interés de empresas nacionales e internacionales en el mercado mexicano de combustibles», señaló la CRE en un comunicado.
La estructura industrial previa a la reforma energética implicó una serie de subsidios cruzados entre regiones del país que serán develados con la liberalización de precios.
En su momento, de acuerdo con la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece), el precio tendrá que reflejar diferentes realidades logísticas en el país y, por ende, éste podría subir o bajar en ciertas regiones respecto del precio máximo actual.