El Banco Mundial proyectó un mayor debilitamiento del crecimiento del consumo en Estados Unidos, en medio de una disminución del ahorro personal.

Mientras que el ahorro personal en esa nación fue de 851,200 millones de dólares en el tercer trimestre de 2023, la tasa de ahorro personal (ahorro personal como porcentaje del ingreso personal disponible) fue de 4.2 por ciento. 

Otros factores en el contexto son tasas de endeudamiento aún elevadas y una menor tensión en el mercado laboral. 

Ahorro personal

Hacia adelante, el Banco Mundial predice que el crecimiento de Estados Unidos alcance 1.6% en 2024, considerando que las altas tasas de interés reales restringirán la actividad. 

También espera que la política fiscal se vuelva más restrictiva, incluso cuando las elevadas tasas de interés y el debilitamiento del crecimiento pesan sobre el equilibrio presupuestario federal. 

El ahorro personal se refiere a la cantidad de ingresos que las personas reservan después de pagar impuestos y gastos.

Este indicador fue de 948,200 millones de dólares en el primer trimestre de 2023 y de 1 billón 027,600 millones.

Antes, el ahorro personal en Estados Unidos para todo 2020 sumó 2 billones 678,600 millones de dólares, para luego disminuir a 2 billones 120,500 millones de dólares en 2021 y, finalmente, descender a 622,800 millones de dólares en 2022.

PIB 

En Estados Unidos, el crecimiento económico fue resistente en 2023, repuntando hasta 2.5% estimado, a pesar del aumento de las tasas de endeudamiento y del endurecimiento de las condiciones crediticias. 

El gasto de los consumidores se mantuvo sólido, respaldado por el ahorro acumulado, los mercados laborales ajustados y un impulso a los ingresos disponibles debido a ajustes tributarios extraordinarios. 

También la actividad se vio respaldada por un impulso expansivo proveniente de la política fiscal.

Desde la perspectiva del Banco Mundial, la inversión fija empresarial en Estados Unidos se desacelerará aún más a medida que las empresas se mantengan cautelosas, dadas las incertidumbres económicas y políticas, y refinancien cada vez más la deuda corporativa a tasas de interés más altas. 

El banco proyecta que el crecimiento económico aumente hasta 1.7% en 2025, más cerca de su tasa de tendencia, a medida que el impacto de la flexibilización de la política monetaria se traslade a la economía.