Si bien los programas de apoyo del gobierno de Canadá han comenzado a disminuir, el poder adquisitivo de los hogares sigue siendo respaldado por grandes cantidades de ahorros, destacó Royal Bank of Canadá.

Aunque la tasa de desempleo se mantuvo por encima de los niveles previos a la pandemia a finales de 2021, los mercados laborales mejoraron sustancialmente desde el inicio de la pandemia de Covid-19 y este banco espera que continúen mejorando hasta 2022.

En general, si bien persiste la incertidumbre con respecto a la pandemia de Covid-19, Royal Bank of Canadá proyecta que la recuperación económica mundial continúe en 2022, aunque esto podría variar o ser desigual en las diferentes regiones.

También espera que el Banco de Canadá y otros bancos centrales comiencen a aumentar las tasas de interés en el año fiscal 2022.

Las presiones inflacionarias en curso tienen el potencial de afectar los resultados de este banco en el año fiscal 2022.

Por ello, Royal Bank of Canadá continuará buscando un crecimiento de volumen líder en la industria, esfuerzos de eficiencia operativa y transformación de canales para lograr su visión de ser un banco de relaciones habilitado digitalmente.

En el Caribe, espera una recuperación económica a medida que los viajes y el turismo continúan mejorando, respaldados por el aumento de las tasas de vacunación.

Además en su perspectiva considera que el estímulo fiscal continuo y las condiciones monetarias acomodaticias en algunos países impulsen el gasto de los consumidores y el alivio del desempleo.

Ahorros

La actividad en los sectores de servicios de alto contacto en Canadá, como restaurantes y alojamiento, mejoró durante el verano pasado a medida que se reabrieron las economías provinciales, aunque las industrias relacionadas con los viajes siguen deprimidas en relación con antes de los niveles pandémicos.

Mientras tanto, la producción de bienes de la economía se ha limitado por las continuas interrupciones de la cadena de suministro.

El crecimiento de los precios al consumidor se aceleró a medida que la economía reabrió, y los costos más altos de los insumos comerciales impulsados ​​por el aumento de la demanda y las interrupciones en la cadena de suministro amenazan con nuevos aumentos por encima de las tasas previas a la pandemia hasta el calendario 2022.