De toda la azúcar importada (de caña o de remolacha y sacarosa químicamente pura, en estado sólido), Brasil lidera la proveeduría a nivel mundial.

De 2021 a 2022, las exportaciones brasileñas de este tipo de azúcar aumentaron 20%, a 11,004 millones de dólares, de acuerdo con datos de la Secretaría de Economía de Brasil.

¿Qué países consumieron más azúcar brasileña en 2022? China (1,693 millones de dólares, +20% interanual), Argelia (773 millones, sin cambio porcentual), Nigeria (639 millones, +7%), Marruecos (636 millones +59%) y Canadá (505 millones, +16 por ciento).

Otros grandes exportadores de azúcar en el mundo son India, Tailandia, Alemania, Francia y México.

Regionalmente, los sectores del azúcar y automotriz son los únicos excluidos del libre comercio dentro del Mercosur (conformado por Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay).

No existe un calendario para la inclusión del azúcar en el régimen de libre comercio, aunque las conversaciones sobre el tema se reanudaron en 2017.

Desde la creación del Mercosur, hubo planes para incorporar el azúcar a la Unión Aduanera y se creó un Grupo Ad Hoc con ese fin.

Brasil cree que es hora de avanzar hacia una liberalización gradual del comercio de azúcar en el Mercosur, según informó el gobierno brasileño.

De acuerdo con la Organización Mundial de Comercio (OMC), Brasil había iniciado una disputa en esa organización (No. DS579) contra India sobre la caña de azúcar y los subsidios al azúcar.

Azúcar importada

Con el programa de etanol de la India, la cuestión de las subvenciones a las exportaciones de azúcar podría mitigarse.

Además, 90% de los productores de caña de azúcar indios son marginales y poseen escasas tierras.

Sin embargo, en Brasil los productores de caña de azúcar de los estados del norte y el noreste recibieron un subsidio directo, el Subsidio Regional al Productor.

India espera que se celebren conversaciones bilaterales amistosas para resolver esta cuestión que beneficiaría a ambos países

En Brasil, el Programa BNDES de Apoyo al Sector Sucroalcoholero es una iniciativa más de apoyo a la lucha contra los efectos económicos de la pandemia de coronavirus, dirigida directamente a las empresas del sector sucroalcoholero que realizan actividades de almacenamiento de etanol combustible y tienen ingresos superiores a 300 millones de reales brasileños.

El BNDES ha anunciado la puesta en marcha de un nuevo programa denominado Programa de Apoyo al sector del Azúcar y el Alcohol a partir de agosto de 2020 para apoyar a la industria que se enfrenta a desafíos debido a la crisis del coronavirus.

Apoyos gubernamentales

El programa está dirigido a las empresas del sector sucroalcoholero que realizan actividades de almacenamiento de etanol combustible para garantizar que no haya efectos de depreciación en los precios de los combustibles.

Se trata de una acción integrada con otros bancos, mediante cofinanciación, para apoyar a estas empresas en la necesidad de liquidez generada por la crisis.

Con esto, el BNDES busca minimizar el riesgo de escasez de energía en el período post-pandémico.

Al tiempo que la línea de crédito será de 600 millones de dólares, se contratará a través de un consorcio de bancos privados liderado por el Banco do Brasil.

El programa fomenta el mantenimiento y la reposición de puestos de trabajo en el sector.

Además, preserva la sostenibilidad ambiental, ya que el etanol es una fuente de energía limpia y renovable. La operación tendrá un plazo de 24 meses, con un período de gracia de hasta 6 meses, y la garantía será el stock de etanol que tenga cada planta.