Estados Unidos, Chile e Israel quedaron exentos de la salvaguarda que Canadá fijó a sus importaciones de siete productos de acero, mientras que México fue incluido parcialmente.
En términos de volumen, Canadá es el principal exportador de acero hacia Estados Unidos, representando el 16.5% del total y México es el cuarto exportador de acero hacia ese país, con 9.2%.
Las salvaguardas se imponen por las normas comerciales internacionales en circunstancias excepcionales para responder a los aumentos en las importaciones que se realizan con el riesgo de perjudicar a los productores y trabajadores.
De acuerdo con la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y del Acero (Canacero) de México, la industria siderúrgica enfrenta un problema estructural.
La aplicación de fuertes e importantes subsidios a las empresas chinas por parte de su gobierno ha originado una fuerte sobrecapacidad instalada y la posibilidad de ofrecer en su mercado precios muy preferentes a los del resto del mundo, generando una masiva migración de fábricas hacia China del resto del mundo y una gran transferencia de empleos manufactureros, derivados de las cadenas de valor del acero.
Dado que México no recibió una exención total, Rogelio Garza, subsecretario de Industria y Comercio de la Secretaría de Economía, dijo que se tratará de demostrar, durante el periodo de la medida preliminar, que las exportaciones de México no dañan al mercado canadiense.
De así así, Canadá deberá resarcir el pago de las cuotas que hagan los exportadores mexicanos.
Análisis para sanciones sobre acero
En otro escenario, el gobierno de México informó que podría imponer represalias comerciales contra Canadá por 212 millones de dólares en respuesta a la salvaguarda.
Garza informó que existe la posibilidad de que México imponga estas represalias incluso antes de que concluya el periodo preliminar de la medida.
México nunca ha impuesto represalias comerciales a Canadá, con quien tiene un tratado de libre comercio desde 1994.
Según la Secretaría de Economía, la medida afectará a las exportaciones mexicanas de tubería de perforación petrolera y alambrón.
La salvaguarda canadiense se impuso en un momento en que Estados Unidos tendría que quitar los aranceles que cobra, argumentando preocupaciones de seguridad nacional, a las importaciones de acero y aluminio originarias de sus dos vecinos, tras la conclusión de las negociaciones del Acuerdo entre Estados Unidos, México y Canadá (USMCA).
La salvaguarda entrará en vigor a partir del 25 de octubre de 2018, durará preliminarmente 200 días y fijará un arancel del 25% a las importaciones “en los casos en que el nivel de las importaciones de los socios comerciales supere las normas históricas”, según el comunicado del gobierno de Canadá.
Los productos afectados son: tubos para uso en el sector energético, alambrón, varilla corrugada, placa en hoja (grandes dimensiones), lámina en caliente, acero prepintado y alambre de acero inoxidable.
Canadá argumentó que las restricciones representan «otros pasos para prevenir el desvío de productos de acero extranjeros a Canadá, y brindan alivio a los usuarios de acero y aluminio en circunstancias específicas que están pagando por las contramedidas de ciertos productos importados de los Estados Unidos».