México se ubicó en la posición 56 en la Clasificación Mundial de Competitividad 2023 del IMD, un lugar menos en comparación con la edición anterior.
Por un lado, sus principales mejoras fueron en empleo (crecimiento a largo plazo), población activa (también crecimiento a largo plazo), crecimiento de la población, ingresos por turismo, exportaciones de servicios comerciales, crecimiento real del PIB per cápita, niveles de remuneración, movilidad entrante de estudiantes y densidad de nuevas empresas.
También el país tuvo mejoras en adaptabilidad de la política gubernamental, finanzas públicas, resistencia de la economía, calidad del transporte aéreo, riesgo de inestabilidad política, acceso al agua, soborno y corrupción, superávit/déficit presupuestario público, exposición a la contaminación por partículas, tasa de desempleo y personal extranjero altamente cualificado.
Por otra parte, los mayores declives de México fueron en mano de obra cualificada, competitividad de costos, relaciones laborales eficaces, dinamismo de la economía, entorno favorable a las empresas, actitudes abiertas y positivas, acceso a la financiación, alto nivel educativo, infraestructura fiable y calidad del gobierno corporativo.
Otros declives estuvieron en el régimen fiscal competitivo, entorno jurídico eficaz, estabilidad política y previsibilidad, sólida cultura de I+D y competencia del gobierno.
Los criterios para evaluar las anteriores 15 mayores mejoras y las 15 mayores disminuciones en el desempeño global de la economía mexicana están determinados por los mayores cambios porcentuales en el valor de cada criterio de un anuario al siguiente.
Clasificación Mundial de Competitividad
El ranking se elabora por el Instituto para el Desarrollo Gerencial (IMD, por su sigla en inglés), con sede en Suiza.
El IMD es una institución académica independiente con raíces suizas y alcance mundial, fundada hace casi 75 años por líderes empresariales para líderes empresariales.
Desde su creación, el IMD ha sido una fuerza pionera en el desarrollo de líderes que transforman las organizaciones y contribuyen a la sociedad.
Con sedes en Lausana (Suiza) y Singapur, el IMD ha estado clasificado en el Top 3 del ranking anual de Executive Education Global del FT durante los últimos nueve años consecutivos y entre los cinco primeros durante 17 años consecutivos. Sus programas MBA y EMBA han sido repetidamente señalados entre los mejores de Europa y del mundo.