El consumo privado en México ha crecido a un ritmo moderado, impulsado por la recuperación en el consumo de servicios, de acuerdo con el Inegi y el Banco de México (Banxico).
Al cierre de 2022, el PIB de México continuó avanzando, aunque con una desaceleración respecto del desempeño observado en los primeros tres trimestres de 2022.
A principios de 2023, la actividad económica nacional continuó creciendo y se mantuvo resiliente ante un entorno externo complejo.
Respecto de la demanda externa, en el bimestre enero-febrero de 2023 el valor de las exportaciones manufactureras presentó una desaceleración asociada, principalmente, con el comportamiento del componente automotriz.
En cuanto a la evolución de la demanda interna, Banxico refiere que en diciembre de 2022 el consumo privado siguió creciendo a un ritmo moderado, impulsado por la recuperación en el consumo de servicios.
Por su parte, la inversión fija bruta mostró un mejor desempeño como resultado, en buena medida, de la reactivación de la construcción
Consumo privado
En enero de 2023 y con cifras desestacionalizadas, el Indicador Mensual del Consumo Privado en el Mercado Interior (IMCPMI) aumentó, en términos reales, 1.6 % a tasa mensual.
Para precisar el indicador: el IMCPMI mide el comportamiento del gasto de los hogares residentes del país en bienes y servicios de consumo, tanto de origen nacional como importado. Se excluyen las compras de viviendas u objetos valiosos.
La mayoría de las series económicas se ven afectadas por factores estacionales y de calendario.
El ajuste de los datos por esos factores permite obtener las cifras desestacionalizadas. Su análisis ayuda a realizar un mejor diagnóstico de la evolución de las variables.
Según la SHCP, el consumo privado registró un crecimiento real de 2.8% en 2022, a pesar de las presiones inflacionarias y condiciones financieras más restrictivas.
Servicios
Lo anterior estuvo impulsado por la solidez en el mercado laboral, la recuperación gradual del ingreso real disponible, así como el uso de los ahorros acumulados por los estímulos fiscales de la pandemia y el apoyo del crédito al consumo.
Por su parte, en 2022 se registró una mayor demanda de servicios con un crecimiento real de 4.5% anual, mientras que el segmento de bienes se contrajo 0.5% en el mismo periodo, debido al regreso hacia los patrones de consumo previos a la pandemia.
No obstante, en enero de 2023, el gasto real en bienes duraderos creció 5.2% con respecto al mes previo, con cifras ajustadas por estacionalidad, tras dos meses de caídas consecutivas, y se mantuvo 27.3% por encima de su nivel pre-pandemia, lo que sugiere una mayor resiliencia ante el aumento de las tasas de interés por la política monetaria de la Fed.
Mientras tanto, al interior, sectores clave para México como electrónicos, electrodomésticos y equipo de transporte crecieron 1.7, 3.7 y 11.9%, respectivamente, en su variación mensual real de enero de 2023.