El secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray, y el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo, iniciaron este lunes una visita de trabajo a la ciudad de Washington, D.C., donde sostendrán reuniones en las que abordarán asuntos sobre el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), migración, seguridad y frontera.
Los funcionarios tendrán encuentros de trabajo con Robert Lighthizer, representante comercial de Estados Unidos, para dar seguimiento al estatus de la renegociación del TLCAN.
Asimismo se reunirán con Larry Kudlow, director del Consejo Económico Nacional de la Casa Blanca, para tratar la agenda económica entre ambos países.
Por su lado, Videgaray se reunirá con John F. Kelly, jefe de Gabinete del presidente Donald Trump; Michael Pompeo, secretario de Estado, y Kirstjen Nielsen, secretaria de Seguridad Interna, para discutir temas de la agenda bilateral, como migración, seguridad y frontera.
“El gobierno de México reafirma su interés y compromiso en mantener el diálogo constructivo con Estados Unidos, basado en el respeto mutuo”, dijeron ambas Secretarías en un comunicado.
El TLCAN entró en operación en enero de 1994, fecha a partir de la cual los tres países iniciaron un proceso de 14 años para eliminar gradualmente miles de barreras con miras a tener una integración regional.
Este acuerdo comercial contiene compromisos de liberalización comercial que establecen nuevas reglas y disciplinas para futuros TLC sobre temas importantes para Estados Unidos, incluida la protección de los derechos de propiedad intelectual, el comercio de servicios, los procedimientos de solución de controversias, la inversión, el trabajo y el medio ambiente.
Las disposiciones de apertura del mercado del TLCAN eliminaron gradualmente casi todas las barreras arancelarias y la mayoría de las barreras no arancelarias al comercio de mercancías.
Actualmente, el promedio de los aranceles aplicados a las importaciones estadounidenses procedentes de México es de 2.07%, de conformidad con el TLCAN; mientras que los negocios estadounidenses enfrentan aranceles promedio de 10 por ciento.