El sector mundial de las bebidas energéticas es en realidad un duopolio, lo que crea fuertes ventajas competitivas para Monster y Red Bull.
Ambos controlan una cuota combinada de aproximadamente 80% del mercado estadounidense y 50% estimado de los 50,000 millones de dólares del mercado mundial de bebidas energéticas, según Loomis Sayles Funds II.
Construida pacientemente mediante un marketing de base no tradicional, la marca icónica de Monster es una ventaja competitiva tan difícil de replicar que incluso Pepsi y Coca-Cola fueron incapaces de hacer incursiones significativas en el rentable y creciente mercado de las bebidas energéticas, a pesar de más de una década de esfuerzos e inversiones.
En 2014, Monster se asoció con Coca-Cola, adquiriendo esta última una participación del 16.7% en la empresa. Además, Monster se convirtió en su socio exclusivo en bebidas energéticas.
Gracias a esta alianza, Monster accede al sistema de distribución global de Coca-Cola. Esto acelera su expansión internacional y amplía sus ventajas de escala.
Loomis Sayles Funds II considera que las bebidas energéticas tienen un futuro prometedor. También cree que el aumento continuo del consumo per cápita en mercados internacionales impulsará un crecimiento sostenido durante su horizonte de inversión.
Bebidas energéticas
Kona Gold Beverage señala que el sector de las bebidas energéticas crece cada año. En 2021, las ventas en Estados Unidos se estimaron en 14,000 millones de dólares. Además, se espera que las ventas globales alcancen los 53,000 millones de dólares.
En 2020, Red Bull lideró la industria con aproximadamente el 25% del mercado. Por otro lado, Monster logró una cuota de mercado cercana al 15%.
Desde el lanzamiento de Red Bull en 1997, muchas otras bebidas energéticas han seguido sus pasos. Esto ha transformado al sector en una opción clave para los consumidores dentro del mercado de bebidas.
El éxito de Red Bull y Monster, que juntos representaron el 40% de las ventas de bebidas energéticas en Estados Unidos en 2020, ha impulsado a esta industria a competir directamente con la del café.
Las bebidas energéticas tienen una media de 200 mg de cafeína, lo que equivale a unas dos tazas de café.