Durante más de dos décadas, el Acuerdo de Suspensión del Tomate ha permitido regular y dar certidumbre al acceso del tomate mexicano a los Estados Unidos, en un mercado con una creciente demanda, destacó la Secretaría de Economía en un comunicado.
Además, dijo, ofreció a los consumidores estadounidenses y a las industrias que utilizan al tomate como insumo, allegarse a una mayor variedad de tomates, de mejor calidad y a precios competitivos.
Este martes, por la noche, Estados Unidos y organizaciones mexicanas de exportaciones de tomates llegaron a un nuevo acuerdo de suspensión en el que pactaron inspeccionar la calidad de esa hortaliza en el 92% de los camiones que cruzan la frontera.
También convinieron incrementos en los precios de referencia para tomates de especialidad y un aumento en el precio de los tomates orgánicos 40% arriba del precio de los convencionales.
“Con el anuncio de una posible terminación de dicho acuerdo, se abrió un grave riesgo para el sector exportador por su impacto en producción y empleo. Para evitar dichas afectaciones resultaba indispensable mantener el Acuerdo de Suspensión entre el Departamento de Comercio y los productores mexicanos.
“Con este objetivo como meta principal, a lo largo de toda la negociación de los últimos meses, los productores mexicanos mostraron disposición y flexibilidad para alcanzar un nuevo acuerdo que beneficiara a todas las partes involucradas”, expresó la Secretaría de Economía.
Acuerdo de suspensión
Con la firma del Acuerdo de Suspensión, el Departamento de Comercio abre un periodo para comentarios públicos de 30 días. El nuevo acuerdo entrará en vigor el 19 de septiembre próximo, suspendiendo la determinación final del propio Departamento de Comercio y permitiendo a los exportadores mexicanos a empezar a recibir el monto de los depósitos en efectivo realizados del 7 de mayo a la fecha.
Aun cuando el Gobierno de México no es parte de este Acuerdo ni puede participar en su negociación, el trabajo conjunto de las Secretarías de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), y de Relaciones Exteriores (SRE), la Embajada de México en Estados Unidos, la Oficina de la Presidencia y la Secretaría de Economía logró brindar un acompañamiento a los representantes de los productores a través de la consulta constante e intercambio de información con las autoridades de los Estados Unidos.
México desplazó a los Países Bajos como el mayor exportador de tomates del mundo en 2018, con ventas externas por 2,261 millones de dólares, un récord. Pero este logro se basa en una dependencia prácticamente total con su vecino del norte, a quien envía 99.7% de sus exportaciones.
En las negociaciones participaron la Confederación de Asociaciones Agrícolas del Estado de Sinaloa (CAADES), la Asociación Mexicana de Horticultura Protegida (AMHPAC), el Consejo Agrícola de Baja California (CABC), el Sistema Producto Tomate Nacional (SPTN) y la Asociación de Productores de Hortalizas del Yaqui-Mayo (APHYM).