El comercio mundial se ha recuperado más rápidamente que los otros componentes de la producción mundial, pero aún enfrenta desafíos, según el Banco Mundial.
Después de una contracción de 6% en valor en 2020, el comercio mundial de mercancías crecería 19% en 2021, de conformidad con estimaciones de la Conferencia de Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD).
Desde el punto de vista del Banco Mundial, la recuperación del comercio mundial comenzó antes y ha sido más fuerte que la de otros componentes de la producción mundial, ya que el impacto de la pandemia en las actividades que requerían un contacto cara a cara alentó inicialmente una rotación de la demanda hacia el consumo de bienes duraderos, que tienen una alta intensidad comercial.
Actualmente, el comercio de manufacturas se ve limitado por los cuellos de botella y las tensiones en el suministro en las cadenas de valor mundiales, que se vieron exacerbados temporalmente por el bloqueo del Canal de Suez en marzo.
Las empresas han experimentado un fuerte aumento en las tarifas de flete y una escasez localizada de contenedores de envío.
Para aumentar la resiliencia y mitigar los problemas logísticos, las empresas han aumentado el uso de tecnologías digitales y proveedores y sitios de producción diversificados.
Comercio mundial
Para el Banco Mundial, es probable que las presiones sobre los precios asociadas con los cuellos de botella de la oferta disminuyan con el tiempo a medida que el crecimiento global se modere y los transportistas amplíen la capacidad.
Los datos de alta frecuencia apuntan a un repunte en algunos componentes del comercio de servicios, como las telecomunicaciones y los servicios financieros.
Sin embargo, el turismo sigue deprimido, incluso en países que no han experimentado grandes brotes, como las pequeñas economías insulares.
En general, se espera que los viajes internacionales se vean limitados durante algún tiempo debido a las persistentes restricciones de movilidad y la renuencia a viajar mientras el virus no esté completamente controlado.
El crecimiento del comercio se ve obstaculizado por los altos costos comerciales, que siguen siendo particularmente elevados en las economías emergentes y en desarrollo.
Los costos comerciales surgen principalmente de los gastos de transporte y los procedimientos aduaneros engorrosos, y es probable que hayan aumentado aún más como resultado de medidas proteccionistas, como los aranceles sobre el comercio entre Estados Unidos y China y los controles de exportación de alimentos y productos médicos.
Después de una de 5.3% en 2020, la OMC prevé que el comercio mundial de productos crecerá 8% en 2021 en términos de volumen, mientras que el estimado del FMI es de 8.4 por ciento.