Maersk, una empresa de logística integrada de contenedores que opera en 130 países, prevé que el crecimiento económico mundial ronde 2% en 2023.
Pese a la mejora del primer trimestre del año actual, en el segundo empezaron a aparecer grietas en las perspectivas económicas.
En China, la recuperación de la reapertura que siguió al fin de la política de cero-Covid perdió fuelle, y el sector inmobiliario local no muestra signos de repunte.
Al mismo tiempo, en Estados Unidos y Europa, el rápido aumento de los tipos de interés creó tensiones en el sector bancario en el primer semestre y ha surgido la preocupación por posibles repercusiones en otras instituciones financieras.
Maersk indicó que los indicadores de las encuestas apuntan a un crecimiento plano, en el mejor de los casos, en Europa y Estados Unidos en el segundo semestre de 2023 y principios de 2024, con un riesgo importante de recesión en ambas regiones.
El sector manufacturero sigue atravesando dificultades, y el índice mundial de directores de compras ha permanecido en territorio de contracción desde septiembre de 2022.
Crecimiento económico
Paralelamente, la demanda final ha empezado a debilitarse, y el gasto en inversión, tanto en bienes de equipo como en vivienda, se ha resentido del rápido aumento de los tipos de interés.
Los consumidores europeos han seguido ajustando su gasto en bienes en el segundo trimestre. La caída fue moderada en la zona euro, con un descenso del comercio minorista de 1.7% en abril-mayo (interanual). Más grave fue en Reino Unido, donde el consumo de bienes cayó 2.3 por ciento.
Por otro lado, en Estados Unidos, el crecimiento del consumo de bienes se mantuvo en terreno positivo en abril-mayo (1.1% interanual), pero el crecimiento secuencial se ha ralentizado claramente.
Mientras tanto, la corrección de los inventarios sigue su curso. Aunque la relación existencias/ventas ha mejorado en el caso de los minoristas, sigue siendo elevada entre los mayoristas, lo que indica que se están haciendo esfuerzos para alinear los inventarios con la demanda, pero aún queda trabajo por hacer, lo que seguirá afectando a las actividades logísticas de todos los segmentos.