Francia dominó las importaciones de energía eléctrica a nivel mundial en 2022, al totalizar 16,779 millones de dólares, un aumento de 320% a tasa anual, de acuerdo con datos de la Dirección General de Aduanas e Impuestos Indirectos.

Por primera vez desde 1980, el saldo de este país en su balanza comercial de energía eléctrica fue negativa, de -7,751 millones de dólares.

En mayor medida, sus importaciones fueron de España (4,224 millones de dólares, con un crecimiento de 311% interanual) y Reino Unido (3,891 millones, +1,000 por ciento).

Su saldo neto, en términos de volumen, fue de 16.5 TWh, lo que representa algo menos de 4% del consumo nacional de electricidad.

Un TWh (teravatio-hora) es una unidad de energía equivalente a 1 billón de vatios-hora (1012 Wh).

En conjunto, Francia fue importadora todos los meses del año, con dos excepciones: en febrero de 2022 (cuando la balanza fue exportadora gracias a la abundante generación eólica y a las altas temperaturas), y en mayo de 2022 (cuando la balanza estuvo cerca del equilibrio).

Según el informe anual de electricidad presentado el pasado 16 de febrero por el gestor de la red de transporte de RTE, la balanza comercial aumentó sobre todo en verano, periodo en el que Francia suele ser un gran exportador: sólo los meses de julio, agosto y septiembre representaron 60% del saldo negativo, es decir, 10 TWh de importaciones.

Energía eléctrica

Esto es consecuencia directa de la históricamente baja disponibilidad de energía nuclear y de la menor generación hidroeléctrica (resultado de la sequía de primavera y verano que afectó a Europa) durante este periodo.

El hecho de que Francia importe durante los periodos tensos del invierno es normal y se explica por la gran sensibilidad a la temperatura del consumo francés.

En 2022, esta tendencia se vio acentuada por la reducción de la producción interior.

Aun así, Francia ha sabido aprovechar las salidas económicas para exportar su producción (sobre todo nuclear y renovable) en periodos menos tensos, como durante el mes de febrero o la segunda quincena de diciembre.

Al mismo tiempo, la producción de electricidad literalmente colapsó, pasando de 522 a 445 TWh. Una caída cercana a 15% tras los reveses del parque nuclear nacional y la sequía que impactaron a la producción de las centrales hidroeléctricas.

Otros exportadores de energía eléctrica a Francia en 2022 fueron: Bélgica (3,479 millones de dólares, +198%), Alemania (3,153 millones, +321%) y Suiza (1,812 millones, +215 por ciento).