Las pólizas en el marco del Programa Federal de Seguro de las Cosechas de Estados Unidos aseguran contra pérdidas en cosechas, ingresos agrícolas, márgenes de utilidad, el conjunto de ingresos de la explotación agrícola y otros tipos de pérdidas, de acuerdo con la Organización Mundial de Comercio (OMC).
La Agencia de Gestión de Riesgos del Departamento de Agricultura (USDA) administra este Programa, con inclusión del establecimiento de las tarifas de las primas y otras disposiciones.
Las pólizas de seguros, vendidas por agentes de seguros privados, son contratos entre agricultores y empresas aseguradoras autorizadas, y la Corporación Federal de Seguro de las Cosechas (FCIC) ofrece reaseguros a las empresas aseguradoras autorizadas.
Una póliza se renueva automáticamente cada año, a menos que el agricultor la cancele dentro de un plazo prescrito.
En el marco del Programa Federal de Seguro de las Cosechas, las pólizas de seguros, de las que hay unos 20 tipos, abarcan cerca de 130 cultivos, incluidos los cultivos especiales.
Seguro de cosechas
Predominan los cuatro principales cultivos –maíz, habas de soja, trigo y algodón- por lo que se refiere a superficie inscrita e indemnizaciones pagadas.
En 2021 se aseguraron las cosechas de 461.6 millones de acres (deducida la superficie cubierta por más de un tipo de póliza).
El tipo de póliza comprado con más frecuencia es el de protección de los ingresos.
Los agricultores pueden comprar pólizas con niveles de cobertura que van desde la cobertura mínima de pérdidas de cosechas en casos de desastres, en cuyo caso se subvenciona 100% de la prima de seguro pero solo se pagan indemnizaciones para cubrir las pérdidas superiores a 50%, hasta diversos tipos de cobertura adicional («complementaria»).
Las pólizas más comúnmente compradas permiten a los agricultores contratar un nivel de cobertura de hasta 85%, es decir, un nivel siempre inferior al valor total de sus cosechas.
Las primas que pagan los agricultores por una cobertura complementaria también están subvencionadas, y la Ley Federal de Seguros de las Cosechas estipula el porcentaje de subvención de esas primas. Las empresas aseguradoras autorizadas y la FCIC comparten el riesgo de suscripción.
En general, las empresas aseguradoras autorizadas retienen entre 80 y 85% de las primas de seguro y asumen los riesgos asociados a la proporción retenida, y la FCIC ofrece a dichas empresas reaseguros de exceso de siniestralidad para cubrir el riesgo asociado a las primas retenidas de conformidad con lo dispuesto en el Acuerdo Uniforme de Reaseguro y el Acuerdo de Reaseguro del Precio de los Productos Pecuarios.