El turismo mundial registrará pérdida de 1.8 billones de dólares en 2021, de acuerdo con un informe emitido por la UNCTAD y la OMT.
En conjunto, la caída del turismo internacional debido a la pandemia del coronavirus podría causar una pérdida de más de 4 billones de dólares en el PIB global durante los años 2020 y 2021.
En general, el informe evalúa los impactos económicos de tres posibles escenarios -todos ellos reflejan la reducción de las visitas internacionales- en el sector turístico en el 2021.
El primero, proyectado por la OMT, refleja una reducción de 75% en las visitas turísticas internacionales -siendo esta la previsión más pesimista- basada en la reducción de turistas observada en 2020.
Asimismo, en este escenario, una caída de los ingresos turísticos mundiales de 948.000 millones de dólares provoca una pérdida en el PIB real de 2.4 billones de dólares, es decir, un aumento de dos veces y medio.
Esta relación varía mucho según los países, ya que en algunos puede haber un incremento duplicado, mientras que en otros triple o cuádruple.
Además, según el informe, se trata de un multiplicador que depende de los efectos derivados en el sector turístico, incluido el desempleo de la mano de obra no cualificada.
Por ejemplo, el turismo internacional aporta alrededor del 5% del PIB en Turquía y en el 2020, el país sufrió una caída del 69% de las visitas turísticas internacionales.
La pérdida estimada se debe al impacto directo de la pandemia en el turismo y a su efecto dominó en otros sectores estrechamente relacionados con él.
Turismo mundial
El informe afirma que el turismo internacional y sus sectores altamente vinculados sufrieron una pérdida estimada de 2.4 billones de dólares en el 2020, tras una fuerte caída en las visitas turísticas internacionales.
Este año puede producirse una pérdida similar, advierte el informe, señalando que la recuperación del sector turístico dependerá en gran medida de la aplicación global de las vacuna del COVID-19.
«El mundo necesita un esfuerzo de vacunación global que proteja a los trabajadores, mitigue los efectos sociales adversos y se tomen decisiones estratégicas en relación con el turismo, teniendo en cuenta los posibles cambios estructurales», dijo la Secretaria General interina de la UNCTAD, Isabelle Durant.