Cada vez más empresas usan la inteligencia artificial (IA) para detectar fraudes y estafas, indica la Comisión Federal de Comercio (FTC, por su sigla en inglés) de Estados Unidos.
Por ejemplo, Google utiliza la IA para detectar fraudes en línea y spam en los resultados de las búsquedas y para filtrar el spam, el malware y la suplantación de identidad en Gmail.
A su vez, Microsoft hace un uso similar de la inteligencia artificial para la suplantación de identidad y el spam en Outlook.
La FTA refiere que los representantes de las empresas de ciberseguridad afirman que las herramientas de IA también pueden «rastrear patrones en los correos electrónicos fraudulentos utilizando grandes conjuntos de datos y eliminar los correos electrónicos fraudulentos de las bandejas de entrada de las personas».
También los proveedores de terceros pueden ofrecer la detección de estafas basada en la IA, como las herramientas para encontrar sitios web de fraudes fiscales.
Facebook afirma que utiliza herramientas de IA para hacer frente a varios tipos de fraude, aunque, como ha informado la FTC, las estafas en Facebook y otras redes sociales han seguido aumentando.
En concreto, Facebook afirma que utiliza el aprendizaje automático para identificar las estafas y los impostores en Messenger y, en general, que degrada el contenido asociado al fraude, incluyendo: enlaces a dominios sospechosos de encubrimiento (que podrían implicar estafas financieras); páginas predichas como spam (que podrían implicar anuncios falsos, fraude y riesgos de seguridad); y afirmaciones exageradas sobre la salud.
Inteligencia artificial
También utiliza sistemas de detección automatizada de estafas en el Mercado de Facebook, aunque su eficacia es incierta en el mejor de los casos.
Algunas investigaciones académicas se han centrado en el uso de la inteligencia artificial para hacer frente a estos daños, incluido un proyecto financiado con fondos públicos en el Reino Unido para detectar perfiles de citas falsos, dos estudios conectados sobre la detección de afiliaciones de personas influyentes no reveladas, y estudios sobre la detección de spam de correo electrónico.
Las herramientas de IA podrían ayudar a investigar si las empresas tienen una conducta en línea que perjudica a la competencia.
En 2021, por ejemplo, los periodistas de investigación de The Markup utilizaron una herramienta de aprendizaje automático para examinar si «Amazon colocaba sistemáticamente sus propias marcas y exclusivas por delante de marcas más conocidas y con mejores puntuaciones».
Sin embargo, una advertencia para los responsables de la protección de los consumidores o de la competencia es que no tiene mucho sentido utilizar recursos limitados para obtener herramientas de IA sin haber decidido ya qué hacer exactamente con ellas.
Sería más sensato determinar primero lo que un organismo quiere encontrar o aprender y luego ver qué herramientas disponibles, con IA o sin ella, son las más adecuadas y apropiadas para esa tarea.
Por supuesto, también se necesitaría personal capaz de desplegar esas herramientas y evaluar su uso responsable.
