Estados Unidos registró un déficit de 71,300 millones de dólares con México en el sector automotriz en 2016, de acuerdo con datos del Departamento de Comercio estadounidense.
En forma desglosada, ese saldo negativo se conformó por un déficit de 45,300 millones de dólares en los vehículos automotores y de 26,000 millones de dólares en las autopartes.
Estados Unidos tiene su mayor déficit comercial en el sector automotriz con México entre todos los países del mundo.
Con Canadá, el saldo desfavorable para Estados Unidos fue de 27,400 millones de dólares en el año pasado, de los cuales 20,400 millones correspondieron al comercio de vehículos y 7,000 millones al de partes automotrices.
Las estadísticas comerciales oficiales, como las que muestran el balance de autos y piezas, incluyen tanto insumos intermedios como productos finales. En consecuencia, las exportaciones brutas duplican el valor de los bienes intermedios que cruzan las fronteras internacionales más de una vez.
Esto es de especial importancia en la industria automotriz: un vehículo ensamblado en Estados Unidos tiene más de 10,000 partes que provienen de múltiples productores en diferentes países y pueden viajar varias veces al otro lado de las fronteras.
Según una investigación realizada por el diario The Wall Street Journal, una compañía que produce asientos para vehículos motorizados, por ejemplo, incorpora componentes de cuatro estados diferentes de Estados Unidos y cuatro ubicaciones mexicanas, con el ensamblaje final en el Medio Oeste de Estados Unidos.
El gobierno de Trump ha puesto énfasis en el sector automotriz sin ponderar que Estados Unidos tiene superávits con México en el sector de servicios, en industrias como la energética y la del plástico, y en maquinaria, entre otros. Estados Unidos suma asimismo un saldo positivo con México en el comercio del sector de servicios por alrededor de 10,000 millones de dólares anuales.
Tampoco considera otras variables como el contenido (40%) de insumos, partes y componentes estadounidenses en las exportaciones finales de México, ni que la mayor parte de la Inversión Extranjera Directa (IED) mexicana proviene de empresas de Estados Unidos, las cuales concentran sus ventas externas en el mercado estadounidense.
En 2016, Estados Unidos registró su mayor déficit en el comercio de mercancías con China, por 347,038 millones de dólares, seguido por Japón (68,938 millones), Alemania (64,865 millones) y México (63,192 millones). En ese mismo año, México exportó a los Estados Unidos alrededor de 303,000 millones de dólares, de los cuales casi 95,000 millones (31%) eran bienes de capital y casi 131,000 millones (43%) eran bienes intermedios.