La Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos (USTR, por su sigla en inglés) solicitó el viernes consultas con China en la Organización Mundial del Comercio (OMC) sobre medidas que supuestamente impiden que los titulares extranjeros en China protejan su propiedad intelectual y negocien condiciones de licencia y contrato basadas en el mercado.
Esta acción forma parte de una determinación tomada por el presidente Donald Trump en el marco de la Sección 301 de la Ley de Comercio de 1974 de Estados Unidos, que le brinda una serie de facultades para hacer cumplir los acuerdos comerciales, resolver disputas comerciales y abrir mercados extranjeros a bienes y servicios estadounidenses.
Paralelamente, Trump impuso aranceles del 25% sobre importaciones a productos originarios de China por un valor de 60,000 millones de dólares anuales, lo que representa aproximadamente 12% del total de las compras externas estadounidenses desde ese país asiático.
En contraposición, el gobierno de China replicó el sábado que, con esa acción, es Estados Unidos quien viola las normas de la OMC.
La USTR arguyó que China incumple sus compromisos asumidos en el Acuerdo sobre los Aspectos de los Derechos de Propiedad Intelectual relacionados con el Comercio.
Estados Unidos presentó solicitud de consultas con China en la OMC para abordar los requisitos discriminatorios de licencia de tecnología de China. La solicitud se produjo un día después de que Trump anunció que estaba encargando a la USTR iniciar un caso en la OMC para confrontar a China sobre sus políticas que resultan en un trato injusto para las empresas e innovadores estadounidenses que intentan hacer negocios en China.
Según la USTR, China parece estar incumpliendo las normas de la OMC al negar a los titulares de patentes extranjeras, incluidas las empresas estadounidenses, los derechos de patente básicos para evitar que una entidad china utilice la tecnología después de que finaliza un contrato de licencia.
Planteó que China parece estar violando las normas de la OMC al imponer términos contractuales adversos obligatorios que discriminan y son menos favorables para la tecnología extranjera importada.
El argumento de la Administración Trump es que estas políticas chinas perjudican a los innovadores en Estados Unidos y en todo el mundo al interferir con la capacidad de los titulares de tecnología extranjera para establecer términos basados en el mercado en licencias y otros contratos relacionados con la tecnología.
Pero el viceprimer ministro chino Liu He dijo al secretario del Tesoro estadunidense, Steven Mnuchin, durante un diálogo telefónico el sábado, que Estados Unidos ha incumplido las reglas de la OMC en las investigación de la Sección 301.
En su diálogo con Mnuchin, Liu comentó que China todavía espera que ambas partes sigan siendo racionales y trabajen juntas para mantener las relaciones comerciales estables, informó la agencia oficial de noticias Xinhua.
Liu agregó que el informe de investigación estadunidense viola las reglas del comercio internacional y no es beneficioso para los intereses chinos, los estadunidenses ni los intereses globales.