Estados Unidos registró importaciones de 1,500 de millones de dólares de baterías de iones de litio de China, que representan el 47% de las importaciones totales, y 36% más que los 1,100 millones de dólares que produjo en el país.

También las importaciones desde China suman más que las importaciones conjuntas desde los dos próximos proveedores más grandes de Estados Unidos, Japón (520 millones) y Corea del Sur (744 millones), de acuerdo con un reporte anual de la Comisión de Revisión Económica y de Seguridad de Estados Unidos y China (USCC, por su sigla en inglés) difundido este jueves.

Asimismo, según ese documento, si bien Panasonic y LG Chem siguen siendo actores importantes en la producción de baterías recargables, las mega fábricas planificadas de China pueden elevarla por delante de sus competidores, lo que aumenta la dependencia global de China.

Baterías de iones de litio

Las baterías son pesadas ​​y caras de enviar, por lo que China probablemente utilizará su sólida posición en el mercado para establecer o adquirir instalaciones de producción cercanas a fabricantes de automóviles en otros países.

Estados Unidos ha perdido muchos de sus principales fabricantes de baterías, incluidos varios debido a adquisiciones chinas. Desde 2015, los Estados Unidos de Unidad han adquirido alrededor del 50% de las baterías de iones de litio importadas de China.

Además de representar el 61% de la producción mundial, China también tiene un control sustancial de las cadenas de suministro de materiales utilizados en la producción de baterías de iones de litio.

En upstream, produce el 77% del cobalto refinado a nivel mundial, un aumento del 10% en la participación de mercado desde 2012, y produjo el 70% del grafito mundial en 2018.

Finalmente, en midstream, China representa una porción significativa de los cuatro componentes principales utilizados en el ensamblaje de baterías: 45% de los separadores, 66% de los ánodos, 39% de los cátodos y 64% de los electrolitos.