Estados Unidos eliminó a partir de este lunes los aranceles a las importaciones de acero y aluminio originarios de México, impuestos en junio de 2018, bajo la Sección 232 de su Ley Comercial.
En reciprocidad a esta decisión, la Secretaría de Economía mediante la publicación de un decreto eliminó las represalias impuestas el 5 de junio de 2018, a ciertos productos estadounidenses.
“El gobierno de México agradece al gobierno canadiense el haber mantenido una visión compartida con México respecto a la solución deseable para estos aranceles aplicados por EE.UU. bajo la sección 232”, dijo la Secretaría de Economía en un comunicado de prensa.
El viernes, las tres naciones anunciaron un acuerdo para eliminar los aranceles de Estados Unidos sobre esos metales, las tarifas de represalia por parte de sus dos vecinos y los litigios relacionados en la Organización Mundial de Comercio (OMC), además de establecer un monitoreo mayor en el sector siderúrgico regional.
“Creemos y esperamos que (el pacto regional siderúrgico) tenga un impacto favorable a la dinámica del T-MEC ¿Cuál es el impacto? Bueno, nosotros hemos dicho que aspiramos a que la ratificación se logre antes del receso legislativo de Estados Unidos, el receso de verano”, comentó Jesús Seade, subsecretario para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
Acero y ratificación del T-MEC
Como parte del proceso de ratificación, el representante comercial de la Casa Blanca, Robert Lighthizer, debe mandar al Congreso una declaración de acciones administrativas (un resumen de los cambios que implica el T-MEC) y Nancy Pelosi, líder de la Cámara de representantes, debe dar luz verde al inicio de la discusión. Luego la Casa Blanca requiere mandar otro documento, la Legislación de Implementación (los cambios derivados a las leyes estadounidenses), y finalmente un tercer documento, el texto íntegro del T-MEC, para su votación.
“Si no se ratifica, ya será después del verano, y allí la opinión de todos los observadores, y nosotros concordamos, es que se pondría mucho más difícil el debate porque ya se politiza mucho la cosa por las elecciones estatales de noviembre”, añadió Seade
La Cámara de Representantes entrará tentativamente en receso a partir de la última semana de julio y el Senado desde la primera semana de agosto, mientras que ambos cuerpos legislativos retomarán sus trabajos en la segunda semana de septiembre.
«Para mí, un plan B totalmente satisfactorio es que la Cámara Baja logre aprobar a fines de julio (el T-MEC), aunque todavía quede el Senado para después. Eso no sería tan grave, porque el Senado sí tiene una clara disposición de aprobarlo», consideró el viernes Seade, en una conferencia de prensa.
A partir del 23 de marzo de 2018, Estados Unidos aplicó aranceles de 25% y 10%, respectivamente, sobre ciertas importaciones de acero y aluminio, al tiempo que eximió a México, Canadá y la Unión Europea, sólo hasta el 1 de junio.