Las exportaciones de carne de pollo de Brasil crecieron a una tasa interanual de 5.1% en los primeros cuatro meses de 2020, a 1,365 millones de toneladas, con considerando todos los productos, entre frescos y procesados, informó la Asociación Brasileña de Proteínas Animales (ABPA).
A nivel mundial, Brasil se ubicó en 2019 como el mayor exportador de carnes y despojos de aves de corral, con un valor de 6,400 millones de dólares.
Los principales destinos de estas exportaciones brasileñas son países asiáticos: China, Japón, Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Hong Kong, Corea del Sur, Singapur, Irak y Kuwait.
En ingresos de divisas, el saldo total de las ventas internacionales de carne de pollo este año acumuló un aumento del 0.5%, con 2,151 millones de dólares entre enero y abril de 2020, frente a los 2,141 millones del año anterior.
Considerando solo abril del año en curso, hubo una retracción de 4.7% en las exportaciones de carne de pollo, con un total de 343,300 toneladas en ese mes y 360,100 toneladas en abril del año anterior.
En este contexto, con un total 515.9 millones de dólares, el saldo de ventas en abril fue 13.9% más bajo que el obtenido en el cuarto mes de 2019, con 599.1 millones.
“Además del aumento esperado en las ventas a China, hubo un aumento considerable en las exportaciones a destinos en África, Asia y Medio Oriente. El sector está comprometido a mantener el flujo de exportaciones en este período pandémico”, dijo Francisco Turra, presidente de ABPA.
Carne de pollo
El comercio mundial de carne y productos cárnicos se pronostica en 36 millones de toneladas en 2019, un 6.7% más que en 2018, debido principalmente al aumento de las importaciones de China debido a la escasez interna causada por las pérdidas de producción relacionadas con la PPA, según las últimas proyecciones de la FAO.
Se espera que las importaciones totales de carne de China aumenten en un 35% (alrededor de 2 millones de toneladas), con un aumento de las compras en todas las categorías de carne.
Por el contrario, se espera que varios países importen menos carne, incluidos los Estados Unidos y Angola.
Por el lado de las exportaciones, la FAO prevé que gran parte de la expansión prevista en la demanda mundial será satisfecha por Brasil, la Unión Europea, Estados Unidos, Argentina, Tailandia y Canadá.
Sin embargo, la disponibilidad limitada de exportaciones podría deprimir los envíos de carne desde Paraguay, Bielorrusia y Uruguay.