Las exportaciones de servicios se reducirían en torno a 24% en 2020, pues se vieron muy afectadas por la paralización de los servicios asociados al turismo receptor, proyectó la Cepal.
En general, el acceso al mercado es la principal motivación de las inversiones en servicios, entre los que se encuentran el comercio, los servicios financieros y de seguros, el transporte y la logística, la construcción, el suministro de electricidad gas y agua, los servicios de información y comunicaciones, los hoteles y restaurantes, y el sector inmobiliario.
En 2019, las exportaciones de servicios representaron más de 45% del total de ingresos por servicios en la región.
Los viajes internacionales hacia muchos de los países de la región continúan restringidos o con trabas durante el segundo semestre de 2020, después de haberse decretado cierres totales o parciales de fronteras durante el segundo trimestre del año.
Exportaciones de servicios
Como resultado, en los primeros ocho meses del año las llegadas de turistas evidenciaron un desplome en relación con el mismo período del año anterior, tanto en el Caribe (-64%), como en Centroamérica (-66 %) y América del Sur (-63 por ciento).
Por otra parte, la caída del volumen de comercio de mercancías a nivel mundial afectó también a las exportaciones de servicios asociadas a dicha actividad por parte de países de la región.
Por ejemplo, de acuerdo con las cifras disponibles hasta el primer semestre, en el caso de Panamá la gran caída del comercio internacional ya se reflejaba en una disminución de 18% en las exportaciones panameñas de servicios de transporte, que incluyen los vinculados al Canal de Panamá.
En 2019 los ingresos por servicios de turismo representaron aproximadamente 33% del total de las exportaciones de servicios de América del Sur, 50% de las de Centroamérica y México, y 75% de las del Caribe.
En cuanto a las importaciones de servicios, el empeoramiento de la actividad económica regional ha contribuido a que estas se contraigan en torno al 16% y a que la caída sea generalizada en todos los rubros (transporte, viajes y otros servicios).
Con los datos del primer semestre de 2020, las exportaciones de viajes son el rubro más afectado por las restricciones de la movilidad, seguidas por el transporte, sector que se ha visto arrastrado por la caída de las importaciones de bienes, como efecto de una menor actividad regional.
El rubro que presenta la menor contracción hasta el momento es la importación de otros servicios.
Se espera una recuperación durante el segundo semestre gracias a la creciente necesidad de servicios financieros, informáticos, de telecomunicaciones (para mitigar los efectos de la pandemia) y de construcción de infraestructuras (por la reanudación de las industrias extractivas y la inversión pública).
Contextos diferentes
Las exportaciones de servicios y bienes, a diferencia del resto de los componentes del gasto que tienen un comportamiento similar por subregión, presenta un ritmo disímil de caída.
En México y Centroamérica, su contribución negativa al crecimiento del PIB supera en seis veces la de América del Sur.
Esto se debe, en parte, a la pronunciada caída en las exportaciones de servicios vinculados al turismo, así como a una mayor exposición de esta subregión a la disminución de los flujos de comercio internacional de bienes como consecuencia del bajo dinamismo de la economía mundial1.
Por otro lado, la recuperación en los precios de determinados productos básicos ha contribuido a reducir el impacto negativo en las exportaciones de alimentos y metales de los países de América del Sur.
Las importaciones, como resultado de la gran contracción de la demanda interna, contribuyen de manera positiva al crecimiento del PIB debido a su caída.
De este modo, la demanda externa neta continuaría representando un aporte positivo a la variación anual del PIB, como lo hace desde 2019.