Los exportadores de productos lácteos de Estados Unidos advirtieron que si su país se sale del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), estarán obligados a pagar aranceles de entre 10 y 45% en sus ventas a México, su principal destino mundial.

“Si los Estados Unidos abandonan el TLCAN y pierden su ventaja arancelaria, las exportaciones estadounidenses a México estarán en riesgo”, alertó la Asociación de Exportadores de Leche de Estados Unidos (USDEC, por su sigla en inglés) en un reporte.

En virtud del TLCAN, las exportaciones estadounidenses de productos lácteos a México están libres de impuestos. Esto proporciona una gran ventaja a los Estados Unidos porque sus competidores en el mercado de México están sujetos a aranceles de Nación Más Favorecida (NMF) de 20 a 45% en queso, 45% en leche en polvo y 10% en productos de suero de leche.

De retirarse Estados Unidos del TLCAN, los exportadores estadounidenses estarían sujetos a las mismas tarifas NMF que sus competidores.

Como parte de su política comercial, el presidente estadounidense, Donald Trump, sacó a su país del Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP, por su sigla en inglés), y mantiene negociaciones para actualizar el Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos y Corea del Sur (KORUS, por su sigla en inglés) y el TLCAN, cuya séptima ronda se lleva a cabo en la Ciudad de México.

Trump ha hecho de la renegociación del TLCAN una prioridad inicial prominente de su gobierno. Lo ha considerado como el «peor acuerdo comercial» y ha declarado que puede tratar de retirar a Estados Unidos del mismo. Sus críticas las ha centrado en el déficit comercial de su país.

México es el destino de exportación número uno para los productos lácteos de Estados Unidos, con un valor de 1,200 millones de dólares en 2016, lo que significa 25% de todas las exportaciones estadounidenses de ese sector.

También México se ubica como el mercado de exportación de más rápido crecimiento en Estados Unidos, con una tasa de crecimiento anual del 13.7% (desde 2002-2016), y es destino del 45% de las exportaciones totales de leche desnatada y del 30% del total de las exportaciones de queso de Estados Unidos.

México está colocado como el quinto importador mundial de productos lácteos en términos de valor. A su vez, Estados Unidos representaron dos tercios de las importaciones de productos lácteos de México en 2016.

Estados Unidos participó con 93% de las importaciones de leche en polvo descremada de México, 84% de las compras de productos de suero y 75% de las adquisiciones de queso.