La empresa estadounidense Ford Motor informó que prevé aumentar 10.3% las compras de autopartes mexicanas en un plazo de tres años, entre 2016 y 2019, para alcanzar 16,000 millones de dólares.
Ford ha anunciado que invertirá 4,100 millones de dólares para construir cuatro nuevas plantas, una de autos, otra de motores y dos más de transmisiones, en México.
Leo Torres, director de compras y abastecimiento de la filial en México de esta transnacional, estimó que Ford producirá entre 900,000 y 930,000 autos en el país en 2019.
Una vez concretadas las nuevas inversiones, la compañía automotriz operará tres armadoras, tres plantas de motores y dos fábricas de transmisiones en México.
A principios de abril de 2016, Ford difundió que invertirá 1,600 millones de dólares en una nueva planta de ensamble de autos compactos en San Luis Potosí, que iniciará la construcción en el verano, arrancará su producción en el 2018 y generará 2,800 empleos directos para el año 2020.
La compañía no informó qué modelo en específico se producirá ni la capacidad que tendrá esta nueva planta.
Un año atrás, en abril de 2015, comunicó una inversión de 2,500 millones de dólares para ampliar sus operaciones en motores y transmisiones en el centro y norte de México.
Ford inyectará 1,300 millones de dólares para la ampliación de su fábrica de motores en Chihuahua, en la que producirá dos nuevos tipos de equipos diésel.
Otros 1,200 millones de dólares serán para la producción de transmisiones en el central estado de Guanajuato en alianza con la alemana Getrag.
En México, la empresa produce los modelos Fiesta, Fusion y Lincoln MKZ, en todas sus versiones, incluyendo híbridos.
De 2008 a 2019, nueve plantas de ensamble de autos comenzaron o planean entrar en operación en México, propiedad de las empresas Nissan, Infiniti, Toyota, Mazda, Honda, General Motors, Audi, BMW y Kia.