La Representación Comercial de Estados Unidos (USTR, por su sigla en inglés) consideró que no están funcionando las medidas para enfrentar la crisis mundial del acero, motivada por una sobrecapacidad y falta de controles en los subsidios dirigidos a la producción.

En 2016, el Grupo de los 20 (G20) estima que el superávit global de la capacidad siderúrgica alcanzó los 737 millones de toneladas métricas, el nivel más alto visto en la historia de la industria del acero.

Para enfrentar esta problemática, se reunieron el jueves pasado, en Alemania, ministros y funcionarios de 30 grandes productores de acero, entre ellos Japón, China, Estados Unidos, India, la Unión Europea y, en la décima posición por cuanto a capacidad, México.

Formado por un llamado del G20, este grupo de naciones acordó en la Cumbre de Hamburgo, celebrada en julio pasado, «desarrollar rápidamente soluciones políticas concretas que reduzcan la sobrecapacidad de acero» y entregar «un informe sustancial con soluciones políticas específicas para noviembre de 2017, como base para una acción política tangible y rápida».

Pero tras la conclusión de reunión en Alemania la semana pasada, la USTR cuestionó que el informe emitido contiene “muchas recetas de políticas útiles, pero no destaca el fracaso recurrente de algunos países para implementar verdaderas reformas basadas en el mercado en el sector siderúrgico”.

“El Informe erróneamente sugiere que el simple establecimiento de objetivos de reducción de la capacidad ha sido una respuesta efectiva a la crisis, cuando en realidad solo se puede lograr un progreso significativo mediante la eliminación de subsidios y otras formas de apoyo estatal y dejando que los mercados hagan su trabajo”, criticó.

Según el documento, intitulado Informe del Foro Global sobre Capacidad Excesiva de Acero, China juega un papel importante en los esfuerzos globales para reducir el exceso de capacidad. Este país ha establecido objetivos para reducir la capacidad nacional de acero crudo y ha adoptado políticas para limitar las adiciones de capacidad.

El gobierno chino emitió las opiniones sobre la resolución Sobrecapacidad y Dificultades en la Industria del Acero que establecen el objetivo de reducir de 100 a 150 millones de toneladas de capacidad de acero bruto en cinco años a partir de 2016.

Esto implica una caída entre 9% y 13% a 977-1027 millones de toneladas, además de que 500,000 trabajadores serían reubicados, alrededor del 15% del total.

Sobre la base de los resultados de la Política Nacional de Acero de 2017, India señaló que aumentará su capacidad a 300 millones de toneladas para 2030-31 para satisfacer su creciente demanda interna. Indonesia también ha indicado que su Plan Maestro Nacional de Desarrollo Industrial 2015-2035 prevé un aumento en la capacidad de acero bruto.

China, India, Indonesia y Sudáfrica informaron sobre la existencia de empresas siderúrgicas estatales en sus economías. Afirmaron que estas compañías están en la misma categoría que las empresas privadas y tienen un rendimiento comparable para las empresas privadas.

China, Indonesia y Sudáfrica comunicaron que tienen directrices específicas para el desembolso de las empresas siderúrgicas, mientras que en la India no las hay.

El desequilibrio entre la oferta y la demanda de acero en el mundo es un desafío global que ha llevado a un colapso en las fortunas de industrias en todas las regiones, concluyó el Informe.