General Motors enfrenta estrés hídrico en cuatro plantas de producción en México, de acuerdo con información de la propia compañía.
Esta empresa estadounidense automotriz lidera la producción de vehículos ligeros en México. De enero a octubre de 2024, produjo 746,393 unidades. Esto representa un alza interanual de 22.2 por ciento.
El Gobierno y el Congreso de México han tomado acciones y aprobado regulaciones y normas relacionadas con el estrés hídrico en los últimos años. El problema tomó mayor relevancia en 2023, cuando el país tuvo una sequía atípica.
Estrés hídrico
Además, General Motors ocupó la segunda posición en ventas de vehículos ligeros en México. En los 10 primeros meses de 2024, estas ventas fueron de 167,485 unidades. Fueron 13.4% mayores que en el mismo periodo de 2023, según datos del Inegi.
Las siguientes son las plantas de General Motors que experimentan estrés hídrico:
- Ramos Arizpe.
- San Luis Potosí.
- Silao.
- Toluca.
La empresa calcula el consumo de agua en función de la extracción de agua menos el volumen de descarga.
En un informe sobre su Global Reporting Initiative (GRI), General Motors expuso que sigue mitigando el riesgo hídrico mediante la conservación y el reciclaje o la reutilización de aguas residuales tratadas en los procesos de la planta.
Las operaciones de la empresa están sujetas a diversas leyes ambientales. Estas regulan aspectos como las emisiones atmosféricas, los vertidos de agua, la gestión de residuos y la limpieza ambiental. Algunas leyes exigen que las partes responsables financien las acciones de remediación, sin importar si hubo culpa, la legalidad del vertido inicial o la propiedad del sitio afectado. Además, en ciertos casos, se impone responsabilidad solidaria y por los daños relacionados con los recursos naturales.
Para reducir los impactos ambientales de sus operaciones globales, incluida la contribución al cambio climático, la empresa complementa sus programas de cumplimiento con iniciativas de sostenibilidad. Sus iniciativas se enfocan en la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), el consumo y la descarga de agua, así como en la gestión de los residuos operativos.
De enero a octubre de 2024, México produjo 3.4 millones de vehículos ligeros, un aumento interanual de 5.5 por ciento.
Al mismo tiempo, las ventas en el país de estos vehículos fueron de 1.2 millones, 10.8% más sobre el mismo periodo de 2023.