El juego del golf se mantuvo en alta demanda en 2022, con el número de rondas jugadas aproximadamente 16% más que el número de rondas jugadas en 2019.

Además, según Acushnet Holdings Corp., las rondas de golf jugadas seguirán previsiblemente resistiendo en 2023, impulsadas por la demografía de los golfistas, los golfistas dedicados y las condiciones económicas.

Si bien las rondas jugadas en el golf se habían mantenido relativamente estables durante años, el juego experimentó un aumento global aproximado de 8% en rondas tanto en 2021 como en 2020, ya que los golfistas dedicados aprovecharon al máximo el clima favorable, los horarios de trabajo híbridos y un aumento en el tiempo discrecional debido a las circunstancias relacionadas con la pandemia de Covid-19.

El golf es una actividad recreativa que requiere tiempo y dinero.

Sobre todo, la industria del golf se ha visto impulsada por la cohorte de edad de 30 años o más, principalmente los «gen-xers», los «baby boomers» y, cada vez más, los «millennials», que disponen de tiempo y dinero para practicar este deporte.

Dado que un número significativo de baby boomers aún no se ha jubilado, Acushnet Holdings prevé un crecimiento del gasto de este grupo demográfico, ya que se ha demostrado que las rondas de juego aumentan significativamente a medida que los miembros de esta cohorte alcanzan la jubilación.

También la empresa considera que el porcentaje de mujeres golfistas seguirá creciendo, ya que en los últimos años el porcentaje de nuevos golfistas ha sido mayor.

Golf

Más allá de la generación gen-x y de la generación del baby boom, los desarrollos prometedores en el golf incluyen el cambio generacional con los golfistas de la generación del milenio haciendo sus marcas tanto a nivel profesional como amateur y, en 2022, representando 25% de los golfistas en general en los Estados Unidos, y el aumento en el número de juniors (edades 6-17) que juegan al golf en los últimos años.

El juego del golf se aprende mediante la observación y la imitación, y los golfistas mejoran su propio rendimiento intentando emular a los golfistas más expertos.

Los golfistas se ven influidos no sólo por la forma en que otros golfistas realizan el swing, sino también por lo que hacen.

Esta es la esencia de la pirámide de influencia del golf, que está profundamente arraigada en la mentalidad del golfista dedicado.

En la cúspide de la pirámide se encuentra el golfista más dedicado, que intenta ganarse la vida jugando profesionalmente.